Brooks Koepka (-7) llegaba en un buen momento de forma a este Masters. Al fin llevaba tiempo trabajando y compitiendo sin ningún tipo de molestias físicas, la mayoría de ellas derivadas de aquella grave lesión que sufrió en la rodilla derecha en 2021, por la que tuvo que ser intervenido. De acuerdo, el de Florida llegaba en un buen momento y, de hecho, venía de ganar la semana pasada en la última cita de LIV Golf, pero luego hay que salir ahí, al pasto solemne del Augusta National, y demostrarlo. Y eso es exactamente lo que ha hecho.
Koepka ha entregado el tercer 65 de la jornada y comparte el liderato con Jon Rahm (-7) y Viktor Hovland (-7). Además, ha mostrado un aplomo y poderío fuera de toda discusión, más allá de una mala salida en el hoyo 13, único error grave en toda la ronda que le costaba el solitario bogey que aparece en su tarjeta. Sin ir más lejos, se pueden anotar hasta cinco ocasiones de birdie más que razonables que no podía convertir, tres de ellas, en los hoyos 6, 9 y 10, desde distancias que en ningún caso superaban los tres metros, sin olvidar la opción de eagle que tampoco convertía en el hoyo 8, también desde unos dos metros y medio. Pues eso, que ha jugado de libro y, dicho con la prudencia debida, hasta parece que se ha quedado corto con esa magnífica tarjeta de 65 golpes…
Va a ser imposible repasar la tabla de este Masters (y del PGA, y del US Open, y lo que te rondaré, morena…) sin hacerlo en ‘clave LIV’, mucho más cuando algunos de los 18 jugadores del circuito saudí han reconocido que la victoria de cualquiera de ellos sería celebrada de modo casi comunal. También Greg Norman, cabeza visible de LIV, había comentado la posibilidad de una celebración en grupo detrás del green del 18, el domingo, en caso de darse el ansiado triunfo. Pues bien, si hay un abanderado de tales anhelos, ese es ahora mismo Brooks Koepka, casi en exclusiva, porque la actuación ‘coral’ de los chicos LIV, sin ser mala, tampoco ha sido explosiva.
De los 18 que están en el Masters, enseguida causaba baja Kevin Na, que salía a jugar, pero se retiraba enfermo a mitad de vuelta. A partir de aquí, hasta seis han conseguido jugar por debajo del par en una jornada donde lo ha hecho cerca de la mitad de una nómina de jugadores donde, no lo olvidemos, tenemos a cinco amateurs y un buen puñado de ilustres veteranos. Al margen del refulgente Koepka, no hay ningún otro LIV en el top ten del torneo, aunque Cameron Smith (-2), no está muy lejos. Patrick Reed (-1), Phil Mickelson (-1), Joaquín Niemann (-1) y Dustin Johnson (-1), que terminaba con birdie en el 18 para ganarle al campo, completan la relación en números rojos. Cualquiera de ellos, incluyendo a Mickelson, que es siempre un valor seguro en el santuario de Georgia, tienen margen de maniobra, aunque quizá no tanto como pueda suponerse: en el Siglo XXI sólo Tiger Woods ha ganado el Masters sin estar dentro del top ten del torneo después de la primera jornada.
Gooch, Ancer y Varner III firmaban tarjetas al par del campo y el resto ha perdido la partida ante un Augusta National que hoy estaba relativamente asequible, con esos greenes más receptivos, pero donde siempre es absolutamente obligatorio jugar muy bien para hacer resultado.
