Inicio Masters de Augusta Masters de Augusta 2012 Miguel, siempre quedará un poco de Ribera…

Miguel, siempre quedará un poco de Ribera…

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Miguel Ángel Jiménez siempre trata de sacar una sonrisa incluso en las situaciones más desfavorables. Hoy, sin embargo, lo ha tenido difícil. «Estoy con el alma por los suelos», aseguraba a modo de saludo nada más firmar su tarjeta de 81 golpes en la última vuelta del Masters. El malagueño llegaba a Augusta con las expectativas muy altas, pero al final «estoy un poco desfondado, me ha cogido el toro»…

Lo cierto es que Miguel ha tenido una vuelta dura de asimilar para un golfista profesional. No ha querido poner excusas, pero uno va repasando sus hoyos y tiene la sensación de que todo lo que podía salir mal ha salido peor. Así es el relato: “Venía de hacer birdie en el hoyo 5 y en el 6 he hecho un bogey después de un tiro que he pegado pesada y he hecho tres putts. En el 7 he pegado un buen drive y después un hierro 8 perfecto, al sitio, buscando el nervio para dejarla al lado del hoyo y de forma inexplicable se ha quedado arriba. Sitio casi imposible y otros tres putts. En el 11 he pegado un buen tiro, con la línea buena, un poco agresivo, pero se me ha cerrado lo justo y me he ido al agua. En el 16 he pegado un hierro 5 muy bueno, en línea a bandera, pero se ha levantado en ese momento una racha de viento, ha frenado la bola, ha pegado en la chepa del antegreen y directa al agua, ni siquiera se ha ido al búnker… En el 17, en el momento de pegar el drive, ha llegado una ovación del 16, medio he parado el golpe y lo he fallado, doble bogey… Me voy del Masters con mal sabor de boca porque estaba jugando muy bien. Esperaba un poco más de mí”, señaló.

Jiménez se marcha con la sensación de que podía haber hecho mucho más esta semana. “El segundo día es el que peor he pegado a la bola y firmé el par. Pero ayer le di bien y el problema es que fui demasiado avaricioso”, afirma.

Sea como fuere, Miguel al final consigue ponerle buena cara al mal tiempo. “Mañana será otro día. Aquí tengo a toda la tropa, así que ahora vamos a abrir dos botellas de un buen vino español… creo que aún queda un poco de Ribera”.