Gonzalo Fernández-Castaño se plantó en el tee del hoyo 2 de Augusta a la caza y captura de un maravilloso efecto de draw. Así viene dibujado en su manual de este rincón de Augusta. Golpe cerrando para devorar metros de hierba rasurada y darse la opción de llegar de dos con relativa comodidad. Agresivo y ambicioso. Eso sí, el draw no apareció por ningún lado.
Como el jueves y el viernes, lo que estaba diseñado en su cabeza se convirtió en un hook que acabó en el obstáculo de agua. Los dos primeros días se libró de la penalidad, pero ayer no hubo ‘chance’. Bogey. Revés a las primeras de cambio.
Saltamos en el tiempo casi cuatro horas y nos plantamos en el hoyo 18. El madrileño suelta un fantástico drive desde el tee al centro de la calle. Centro geométrico. Mide, 151 metros, agarra el hierro 8 y la manda con gps al palo. La bola se queda a dos palmos. Birdie. El primero y único del día y el primero y único oficial del madrileño en este último agujero de Augusta. Único, por el momento, claro.
En ese lapso de tiempo de cuatro horas lo que hubo fue una fantástica actitud, toneladas de paciencia y un despligue de juego notable del madrileño. No son dos momentos escogidos al azar. El bogey del hoyo 2 bien podría haber sido un directo al mentón de Gonzalo, pero no, esta vez no. “Llevo ya unos cuantos majors a cuestas para saber que los grandes son torneos muy largos, eternos y que hay que tener mucha paciencia y buena actitud”, apunta. Después, claro, la teoría hay que llevarla a la práctica y Fernández-Castaño lo ha conseguido.
El premio es una ronda de 74 golpes con un solo birdie, pasando los pares 5 dos arriba y bajo unas condiciones de juego muy complicadas, con los greenes duros como el mármol de Macael. Gonzalo se encuentra con +2, metido en el top 20 del torneo y aspirando a casi todo este domingo. La victoria parece imposible, salvo vuelta galáctica, no tanto por los siete golpes de diferencia con los líderes, Watson y Spieth, como por los 17 jugadores que tiene por delante. “Hay muchos objetivos en juego mañana, como el top ten y ganarme el derecho de volver el año que viene. Tengo ganas de jugar y a ver si podemos meter una buena vuelta mañana… Lo que está claro que el hook del 2 no lo voy a hacer”.
