El golf es seguramente el deporte más complicado que existe a la hora de partir generaciones o quintas, como ustedes prefieran llamarlo. ¿Dónde acaba la de Rory McIlroy y empieza la de Jordan Spieth? Esa es una buena pregunta. No hay que olvidar que nos encontramos ante una disciplina en la que Miguel Ángel Jiménez, nacido en 1964, compite cara a cara por ganar torneos con Renato Paratore, nacido en 1996. En cualquier caso, los jugadores sí se pueden agrupar en distintos grupos de edad, aunque finalmente todos compitan contra todos en un maravilloso e incomparable totum revolutum.
La victoria de Jordan Spieth en el Masters de Augusta ha abierto la puerta a una nueva era, una nueva generación de jugadores muy preparada que trata de abrirse paso a codazos entre los que ya están y se hacen fuertes por mantener su posición. Spieth nació en 1993, así que bien podríamos decir que su era es la de aquellos jugadores que llegaron al mundo en torno a ese año. Diríamos que es la quinta siguiente a la de McIlroy, nacido en 1989, y en la que también habría que incluir a jugadores de 1990 como Patrick Reed, Brooks Koepka o Victor Dubuisson, o también, por supuesto, a Rickie Fowler, de 1988.
Así, el comienzo de la quinta de Spieth podríamos situarlo en torneo al año 1992. Es una fecha elegida al azar se podrían hacer mil distintas, pero es la nuestra, la mía. Es sólo nuestra selección. Dando ese año por bueno, algo que parece razonable, les dejamos aquí algunos nombres coetáneos del actual ganador del Masters y que están llamados a pelear junto a él durante muchos años. Después, ya veremos qué sucede, no hay que descartar que la rivalidad se establezca finalmente con un golfista diez o quince años mayor. Es lo que tiene este bendito deporte.
Agrupamos por año de nacimiento algunos nombres (hay más y cada uno tendrá los suyos) que hay que tener en cuenta para el presente y el futuro de los que han nacido a partir de 1992:
– 1992: Hideki Matsuyama, Patrick Cantlay o Adrián Otaegui.
– 1993: Jordan Spieth, Oliver Schniederjans, Justin Thomas o Matteo Manassero.
– 1994: Jon Rahm o Matthew Fitzpatrick.
– 1995: Mario Galiano.
– 1996: Renato Paratore.
Son sólo algunos ejemplos, insistimos. Cada uno tendrá su propia lista y considerará que es mejor que ésta. También habrá jugadores con una explosión más tardía y que acaben triunfando por encima de estos que acabamos de mencionar. Fundamentalmente, la idea de este esbozo es la de demostrar que en la generación de Spieth, también se habla español.
