Inicio PGA Championship PGA Championship 2016 Sergio pasa como puede el mal trago de una tarde pestosa
el español sufrió en los greenes, como todos los del turno vespertino, y en un campo de difícil lectura

Sergio pasa como puede el mal trago de una tarde pestosa

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Sergio García (+1) terminaba con un birdie en el 18 y digamos que de este modo salvaba una primera jornada del PGA realmente incómoda, sobre todo para todos aquellos que habían salido a jugar el Lower course de Baltusrol en el turno de tarde.

La sensación fue que en cuestión de minutos los greenes del recorrido de Nueva Jersey se vinieron abajo por culpa del calor. Hasta el punto que tuvieron que regarlos sobre la marcha, interrumpiendo o retrasando el juego. Una extraña situación, cuanto menos, si tenemos en cuenta cómo se cuidan este tipo de detalles en un torneo de semejante envergadura.

Los manchurrones pardos se multiplicaban sobre los tapetes casi por arte de magia y enseguida podía sentirse el sufrimiento de la mayoría de los jugadores, incapaces de adaptarse, aunque bien que lo intentaban. El rodar de la bola era irregular, innoble, y la mayoría de los putts se quedaban cortos, seguramente por los manguerazos. Digamos que el ojo te decía una cosa, viendo ese color pardo, normalmente síntoma de greenes rapidísimos, y el resultado del putt nada tenía que ver con esa lectura. No es tan sencillo negar lo que tus ojos te están diciendo…

El viento también se levantaba por la tarde, soplando de modo muy irregular, muy racheado, por momentos con violencia, muy complicado de leer. La clásica tarde pestosa. Por eso hay que valorar todavía más el resultado de Martin Kaymer (-4) y Henrik Stenson (-3), los mejores de la tarde, casi los únicos que ganaron al campo por este lado del cuadro. El sueco, según se ve, le ha cogido el gusto y puede transformarse de nuevo en un muro para el resto de candidatos.

 

Kaymer ha entendido mejor que nadie los greenes. Al menos cuando pateaba para salvar el par desde dos, tres y cuatro metros. El alemán se ha traído el bisturí fino. Algo parecido puede decirse de Jordan Spieth (PAR), que terminaba firmando una tarjeta mejor que la de Sergio (iban jugando juntos) y realmente cuesta entender cómo lo hizo, cogiendo sólo seis calles. Seguramente gracias a dos putts de tres metros que embocaba para par y a otro más de birdie en el 16 desde más allá de cuatro metros…

García no ha salido demasiado mal parado, aunque también es cierto que por momentos pareció que incluso podría ganar al campo. Habrá que ver cuáles son las condiciones de juego el viernes por la mañana, pero quizá el de Borriol pueda aprovechar el turno matutino para afinar más su juego en un campo algo más previsible o controlable. Pinche aquí para consultar los resultados.