El PGA Championship es el último Major de la temporada, o lo que es lo mismo si hablamos en términos de ránking mundial, es la última oportunidad de ganar cien puntos ganando un torneo. Un botín extraordinario que siempre provoca importantes movimientos en la clasificación.
El único que puede estar tranquilo esta semana pase lo que pase es Dustin Johnson. Su Número 1 no está peligro. Seguirá al mando del ránking el próximo lunes aunque falle el corte y Jordan Spieth (Número 2) gane el torneo. Esto es sólo una muestra de la extraordinaria primera mitad de temporada que hizo el golfista de Carolina del Norte.
Eso sí, el que está amenazado, y mucho, es el Número 2 de la clasificación. El puesto de Spieth es oscuro objeto de deseo. No en vano, hasta cinco jugadores podrían alcanzarlo en caso de victoria y dos de ellos son españoles: Sergio García y Jon Rahm. Sergio igualaría su mejor posición en el ranking mundial, mientras que Jon establecería su mejor registro. Los otros tres que optan a la segunda plaza del ranking son, obviamente Jordan Spieth, Hideki Matsuyama y Rory McIlroy.
Otro que daría un salto de gigante en el ranking mundial con una victoria sería Rafa Cabrera Bello. El canario se metería por primera vez en su carrera entre los diez primeros del mundo y tendríamos a tres españoles en el top ten. Concretamente, ganando, Rafa podría llegar a la séptima posición.
La victoria para Pablo Larrazábal supondría un salto superlativo en el ranking mundial. El golfista catalán no sólo aseguraría sobradamente su presencia entre los cincuenta mejores del mundo, sino que seguramente se colaría en el top 30. Y es que el PGA Championship puede cambiarle la vida a muchos.
