Adam Scott estará presente la próxima semana en la 105ª edición del PGA Championship, segundo major de la temporada. Nada que parezca muy noticioso, ya que el australiano es un habitual de estas citas. Lo que ocurre es que Scott encadenará ya 87 presencias consecutivas en los Grandes. O lo que es lo mismo: los ha jugado todos desde el Open de 2001 y hasta hoy. No es un dato cualquiera. Es muy complicado alcanzar tal registro.
En este apartado Jack Nicklaus sigue siendo la referencia sideral y da la sensación de que nadie, jamás, podrá superar su listón, puesto que el Oso Dorado llegó a jugar 146 majors consecutivos, todos los que se disputaron desde el Masters de 1962 y hasta el US Open de 1998 (en total, disputó 164). Nadie, de hecho, en la historia de los Grandes y más allá de Nicklaus, ha jugado siquiera cien consecutivos, una cifra gruesa y redonda que Adam Scott comienza a tener a tiro, allá en el horizonte…
El asunto es que, detrás de Nicklaus, la mejor marca corresponde todavía a Tom Watson, que precisamente llegó a disputar 87 majors seguidos entre 1974 y 1996, justo la cifra que Scott cumplirá la semana que viene en el East course del Oak Hill Country Club (Rochester, Nueva York). Ni Gary Player, Arnold Palmer o Tiger Woods se acercaron a tal cifra, por citar algunos nombres de peso. Tampoco otros clásicos europeos como Seve, Langer o Faldo.
Como se recordará, Sergio García era el jugador que parecía destinado a superar primero el listón de Watson, pero al español se le cruzó el COVID en noviembre de 2020 y no pudo jugar aquella atípica edición del Masters, cuando ya llevaba 84 Grandes seguidos a sus espaldas. Ese es el gran problema: no sólo necesitas mantener tu juego a un gran nivel, para tener acceso a estas grandes citas, sino que además entra en juego la ruleta de la fortuna con las enfermedades o las lesiones.
Al respecto también se puede indicar que una de las mejores rachas del golf actual es la de Jordan Spieth, que lleva ya 39 Grandes consecutivos y que precisamente se ha retirado esta semana del Byron Nelson por una lesión en la muñeca. Habrá que ver si el texano está listo para jugar el PGA y llegar a cuarenta.
