Miguel Ángel Jiménez (+7) ha finalizado el British Open con una vuelta de 78 golpes. Su gesto lo decía todo. Una mezcla de decepción y resignación. Salió a ganar, lo tenía entre ceja y ceja, y quizás esas ganas acabaron siendo un lastre…
“Ha sido un día durillo, no he lidiado el toro como debía. Ahora mismo no puedo hablar de sensación dulce o agria, está última vuelta me deja muy poco satisfecho”, señalaba el malagueño.
Jiménez tenía la teoría perfectamente dibujada en su cabeza. Sabía que el guión de un remate brillante de torneo pasaba por la paciencia y por disfrutar en el campo. Pero no fue así. Llevarlo a la práctica en un último día de British Open es muy difícil. Es la eterna lección. Miguel, a sus 47 años, lo sabe y se lamenta. “He empezado con demasiadas ansias y hoy no he disfrutado. Me cachís en los diablos 'coloraos'. Uno tropieza siempre en la misma piedra y no termina de aprender”, explica.
Su cara recuerda a la que tenía en Turnberry, hace dos años. O el año pasado en St. Andrews. Miguel sabe que puede hacerlo, se pone en posición, pero no termina de rematar la faena. Eso le reconcome. Aunque no dejará de intentarlo. El año que viene el British se juega en Royal Lytham & St. Annes. “Es un campo que me gusta. Allí quedé tercero”, dice con una sonrisa.
El resultado se iba al garete en el hoyo 4, prácticamente a las primeras de cambio. El de Churriana venía de hacer un bogey en el 1, birdie en el 2 y bogey en el 3 tras un mal golpe desde el tee. Su salida en el 4 se le quedó en muy mala posición, con la bola mucho más alta que los pies, en el borde derecho de la calle. Intentó avanzar metros, luchando contra el viento y contra la mala situación, pero la pelota salió a la izquierda y terminó inugable. Triple bogey mortal de necesidad. Eso sí, Jiménez quiso dejar claro que “no me he abandonado. Las cosas no han salido y punto, pero no me he dejado llevar… esperar que me voy a sacar el puñal del pecho”, bromeaba Jiménez en su intento siempre por restar dramatismo a las situaciones.
Miguel, buen amigo de Darren Clarke, tenía palabras también para el ganador. “Es un jugador impresionante, lleva mucho años en el Circuito, ha tenido baches importantes en su vida y en el golf y se lo merece. El campo le venía perfecto porque recuerda a los links irlandeses donde él se ha criado”, afirma.
También se refirió Jiménez al top ten conquistado por Sergio García con una muy buena vuelta final. “Me alegro mucho por él porque seguro que este resultado le dará ánimos y fuerza para el futuro”, apunta.
