¿Por qué se le da bien el Old course de St. Andrews a Rafael Cabrera Bello? Recordemos: el canario ha jugado en los últimos años ocho rondas de competición en este recorrido (en las seis últimas ediciones del Alfred Dunhill Links) y lo peor que ha hecho ha sido una vuelta al par del campo. Su acumulado en estas rondas es de -20 y su media de golpes es de 69,5. ¿Supone el registro alguna garantía para esta semana? Más que garantía, que quizá sería demasiado decir en un Grande, es un buen punto de partida.
El jugador español, con su habitual despliegue analítico, tiene muy claro por qué se le da bien. Es una razón técnica, por encima de todas las cosas y la explicación de Rafa no tiene desperdicio, además de ser muy lógica y sencilla de entender (VER VIDEO).
De toda maneras, sería necio echar las campanas al vuelo, porque el Old course no es el mismo cuando se juega un Grande. Primero, en la cabeza del propio jugador. Además, porque hay transformaciones sensibles. Un ejemplo muy concreto: durante el Alfred Dunhill Links la arena de los bunkers está dispuesta como piso cóncavo, de tal manera que las bolas que caen en la trampa siempre terminen más o menos en el centro, para facilitar las sacadas (no olvidemos que en este torneo participan amateurs durante las cuatro jornadas). Durante el British, sin embargo, el suelo de las trampas de arena es mucho más plano, de tal manera que muchas bolas pueden llegar a posarse pegadas a los taludes…
