Inicio US Open US Open 2008 Sergio mantuvo el tipo cuando la cosa pintaba muy negra…

Sergio mantuvo el tipo cuando la cosa pintaba muy negra…

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Sergio García (+5) no ha tenido un buen estreno en el Open USA tras la primera jornada en el recorrido Sur de Torrey Pines (San Diego, California). Miguel Ángel Jiménez (+4), que jugó en el turno matutino, tampoco pudo cerrar una jornada redonda …

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Sergio, el jueves en Torrey Pines

  

No obstante, hay mucha tela todavía que cortar y, sobre todo, bases bien fundamentadas que mueven a la esperanza. El de Borriol tuvo un inicio aciago. Desordenado. No cogía calles y tampoco conseguía solucionar en los greenes el desaguisado. No estaba cómodo.

Tras un primer tercio de vuelta con un doble bogey en el hoyo 1, bogey en el 2, y bogeys a los hoyos 5 y 6 (con un buen birdie en el 3, embocando un putt de ocho metros), las alarmas se encendieron en el hoyo 7, cuando desde el primer corte de rough pegó un segundo golpe muy defectuoso y mandó la bola a un barranco. Finalizó ese hoyo con doble bogey…

Pero, y aquí viene lo bueno, fue justo a partir de ese momento cuando Sergio se entonó. Volvió a coger calles y a dejarse oportunidades buenas de birdie que no pudo rematar con el putter y, en definitiva, supo agarrarse al campo cuando la situación pintaba muy fea. Desde ese hoyo 7 no volvió a cometer errores y fue enlazando un par detrás de otro en un campo que no regala nada, hasta acabar con birdie en el hoyo 18 que supo a gloria.

Evidentemente, ha consumido buena parte del margen de error que uno puede permitirse para pasar el corte, pero si muestra la paciencia y el orden de los últimos once hoyos de hoy, aún va a dar mucha guerra el fin de semana. Tanto él como Miguel Ángel Jiménez (+4) tienen todavía mucho que decir. El malagueño también acabó con birdie su vuelta y cogió muchas calles. Le faltó algo de remate, aunque su putter funcionara al nivel de la media del torneo. 

Jiménez ha vuelto a demostrar que está ahí y que tiene recursos para vencer las situaciones más engorrosas. Sabe esperar su momento y su fin de semana, libre de la tensión del corte, podría resultar más que interesante.

Con algunos partidos por acabar, el número de jugadores que han acabado por debajo de par se movía en torno a la decena. Torrey Pines está mostrándose duro, aunque no parece a simple vista un campo injusto. Los bunkers están creando muchos problemas porque los huevos fritos están a la orden del día tal y como están preparados, y el rough alrededor de green es también fiero (el tercer corte de rough en calle también se las trae: no demasiado alto, pero sí muy espeso y duro de pelar, hasta el punto de ver golpes de Mickelson o Edfors que apenas movían la bola unos metros).