Inicio US Open US Open 2010 El Tigre nos ruge en la cara

El Tigre nos ruge en la cara

Compartir

Suele pasar con los grandes campeones. Mira que estamos todos avisados, y sin embargo…

La imagen mostrada por Tiger en las jornadas de jueves y viernes volvió a ser la de ese grandísimo jugador que he perdido un punto de su dominio, de su ritmo, y no termina de alcanzar esa cota de máximo rendimiento. Recordaba al Woods del Masters: notable, pero no excelso.

Así que algunos nos apresuramos a no incluirlo en la primera línea de candidatos al triunfo. Craso error. Y eso que su arranque del sábado confirmaba las peores expectativas, con dos bogeys en los primeros tres hoyos… Bien, a partir de ahí firmaba ocho birdies y un solo bogey más, con un final apotéosico: birdies al 16, 17 y 18. Colosal.

En la jornada más ventosa del torneo, Woods ha regresado (31 golpes por los segundos nueve hoyos). Ha ordenado las ideas. Ha recuperado la confianza. Y tiene que enfrentarse el domingo a uno de los grandes retos de su carrera: ganar un ‘major’ sin salir en el partido estelar. Nunca lo ha conseguido antes. ¿Será capaz de hacerlo precisamente ahora, cuando se le suponía más frágil?

Si hubiera que resumir la mejora de su juego en un solo punto nos atreveríamos a situarlo en los greenes. Ha metido los putts que meses atrás no entraban y que son los que separan a los ganadores de quienes aspiran a serlo. Ya fueran de dos, tres o cuatro metros, Tiger rara vez fallaba en el momento de la verdad, hasta este año 2010 (ya mostró algunos síntomas anómalos en 2009…).  Ese putt cuesta abajo del 17, diabólico también por su pronunciada caída de derecha a izquierda, lo ha tirado con la decisión y entereza que no siempre mostró, por ejemplo, en Augusta.