En una jornada de US Open sólo hay una cosa segura: antes o después, si no en todo momento, vas a sufrir. Así ha sido también, por supuesto, en el caso de los dos españoles que han llegado a salir al campo en la primera y accidentada jornada, Rafael Cabrera Bello (+4, a falta de cuatro hoyos) y Jon Rahm (+6, a falta de tres hoyos). Lo de menos era jugar por encima del par, porque la mayoría de los jugadores así lo han hecho, aunque realmente ambos se marchaban más cargados de la cuenta.
Rafa arrancaba con siete pares consecutivos, lo que ya era mucho más que un excelente síntoma. Incluso, mereció mejor suerte porque estaba siendo capaz de hacer lo que realmente resulta muy complicado en Oakmont, que es dejarse opciones de alrededor de tres o cuatro metros para birdie (hoyos 2 y 3). No hubo manera. Después, en los hoyos 8 y 9 siguió pagando peaje en los greenes, pero esta vez en forma de bogeys. No hubo piedad para él, aunque su situación no es desesperada.
Algo peor, obviamente, es la de nuestro joven amateur, que está debutando en un major. No se equivoque nadie: Jon Rahm no se ha dejado impresionar ni salía alterado a jugar. Antes bien, hasta casi podría decirse que las dos grandes liadas que le han costado ese acumulado de seis arriba (triple bogey en el 3 y doble bogey en el 4) tuvieron más que ver con un exceso de arrojo, arriesgando más de la cuenta en situaciones delicadas. A ese tramo maldito de dos hoyos, además, respondía con un birdie, embocando un putt de unos ocho metros… Antes, en el hoyo 17, ya había firmado su primer birdie en un Grande. Y sin sufrimiento alguno: dejaba la bola en la boca del green en este par 4 corto con un gran disparo desde el tee y luego remataba con dos putts de libro, el segundo muy cortito.
Jon no se ha arrugado, ha disfrutado por momentos, riendo incluso abiertamente junto a su caddie, su buen amigo Ben Shur, y se ha revuelto con coraje ante las adversidades. Un dato muy significativo: es el pegador más largo en lo que llevamos de US Open con más de 330 yardas de media desde el tee. Pues lo dicho, que no se ha cortado un pelo.
Hay tela por cortar y mucha batalla que librar. No olvidemos este dato: en 2007 se pasó el corte con +10 y, al final de las cuatro rondas, el resultado de +11 estaba dentro del top-ten. Son buenas referencias y tampoco se puede descartar que incluso valga un resultado superior para meterse en el fin de semana.
La jornada se reanudará a las 7.30 de la mañana, hora local, 13.30 en España. Sergio García, por su parte, arrancará este viernes a partir de las 15,06 (horario peninsular español), después de ni siquiera haber pisado Oakmont en todo el día, ya que los sucesivos retrasos le iban reteniendo. Estuvo tranquilo, viendo los partidos de la Eurocopa y también el US Open por la televisión, tomando buena nota… Eso sí, el viernes tendrá que jugar 36 hoyos. La segunda ronda arrancará a las 13.45, hora local, 19.45 en la España peninsular.
García tendrá que pegarse una buena paliza el viernes. La USGA pretende reanudar el juego el sábado a las 13.30, y la tercera ronda se disputará por dos tees y en grupos de tres a partir de las 20.45. Consulta aquí los resultados en directo.
