Phil Mickelson mantiene una relación un tanto compleja tanto con la USGA como con Torrey Pines. Sin embargo, no tuvo reparos en reconocer la excelente preparación que se llevó a cabo en el campo para la disputa del US Open, conquistado por el español Jon Rahm el domingo. «Es la mejor que he visto en mi vida», dijo el golfista de San Diego, tras disputar su trigésima edición del torneo.
Para el reciente ganador del PGA Championship, el US Open sigue siendo un torneo ‘maldito’, el único que le falta para completar el Grand Slam. A principios de la semana pasada cumplió 52 años y dentro de sus planes está disputar el US Open de 2022, en Brookline, en busca del major que le falta en su palmarés y con el objetivo de desquitarse del fin de semana aciago (rondas de 76 y 75 golpes) que le descabalgó de la pelea por el triunfo en Torrey Pines.
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«Obviamente, estoy decepcionado por no haber jugado mejor. Pero al mismo tiempo estoy muy sorprendido de que en los 30 años que llevo jugando el US Open esta sea la mejor edición que he visto. Hicieron un trabajo realmente extraordinario y, la verdad, me hace sentir orgulloso y feliz que haya sido precisamente aquí, en Torrey Pines«, reconoció Phil, natural de San Diego, a pocos kilómetros del campo.
A Mickelson en particular le gustó la forma en que la USGA preparó algunos de los hoyos más duros del recorrido californiano (como los números 11 y 12) para que fueran aún más complicado y cómo otros (como el número 2), en los que en condiciones normales se pueden hacer buenos resultados, ofrecían aún más posibilidades de pelear por el birdie. «Este tipo de configuración de campo permite a los jugadores que están jugando bien recuperar terreno… o perderlo», dijo.
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La opinión de Phil sobre el trabajo de la USGA estuvo en sintonía con lo manifestado por otros golfistas destacados del torneo, como el canadiense Mackenzie Hughes, colíder tras 54 hoyos, que describió la configuración del campo como «perfecta». Mickelson insistió en que «hicieron un gran trabajo aquí» y se mostró «muy impresionado» al respecto. Todo un elogio para la organización viniendo de quien viene…
