La madrugada del lunes al martes, David Puig se convirtió en el 68º golfista español que jugará un Grande. Estará la próxima semana en el Los Ángeles Country Club de Beverly Hills para disputar el US Open después de hacerse con una de las cinco plazas que estaban en juego en la previa del Hillcrest Country Club de la ciudad californiana. Un éxito que explica en detalle en Ten-Golf, donde asegura estar en su mejor momento para afrontar esta gran cita de su carrera.
«Tuvimos una ronda de prácticas el miércoles pasado que estuvo bien porque no había mucha gente y pudimos hacer un buen entreno del campo y hacer buenas anotaciones. Ayer 36 hoyos, fuimos de los últimos grupos en salir, el ritmo de juego, muy, muy lento durante los 18 primeros hoyos. Pero bueno, era un campo urbano, básicamente, muchos hoyos muy cerca, algún par cinco muy corto, un par de pares cuatro cortos, entonces bastantes parones desde el tee, pero aún así se jugó bastante difícil, greenes muy duros y penalizan mucho los malos golpes, aunque era corto, bastante penalizador si tirabas la bola donde no tocaba», comienza relatando el golfista barcelonés.
«Teníamos un plan de estrategia, creo que lo hicimos bien. Sólo dos bogeys en 36 hoyos demuestra que lo que es la estrategia y el nivel estuvo bien. Los 18 primeros me quedé con la sensación de que regalé un par de golpes, pero los segundos 18 jugué muy bien, cogí 17 greenes, pateé tres veces para eagle desde bastante cerca, muy bien de nivel, muy cómodo en todos los aspectos, y sobre todo esos 9 últimos donde pensaba que el -8 ó -9 iba a ser suficiente, pero el birdie en el último hoyo me dio no tener que ir a playoff, que se ha jugado esta mañana. Jugué un muy buen último hoyo, pegué un gran drive, un hierro 5 bastante cerca y no sufrí para nada. Sí sabía que en el último tee tenía que hacer birdie para evitar el playoff y tuve la suerte de hacerlo y con muchas ganas de jugar la semana que viene» explica.
«A ver si sale una muy buena semana y oye, siempre hay que soñar, así que por qué no yo»
Con la mente ya en el US Open, David no renuncia a absolutamente nada y llega en su mejor momento de juego. «A ver si sale una muy buena semana y oye, siempre hay que soñar, así que por qué no yo. Creo que estoy en un buen momento, como os dije hace unos meses que hablamos, que estaba cerca. He llegado a ese punto en que estoy bastante cómodo. En la última vuelta del torneo de Washington del LIV lo demostré un poco y desde entonces he seguido sintiéndome muy cómodo. Así que nada, espero que la semana que viene salga una buena semana, con muchas ganas de disfrutar mi primer major y hacerlo muy bien».
