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ALOHA, A RAS DE ROUGH (II)

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La intrahistoria de la segunda ronda del Open de Andalucía

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Miguel Ángel Jiménez rastrilla el búnker de la izquierda del green del 17

– Olazábal se apunta a Houston (-1): José María Olazábal ha decidido apuntarse al Shell Houston Open, torneo del Circuito Americano previo al Masters de Augusta. Será allí donde el jugador vasco prepare el primer grande del año, aunque Olazábal mantiene la cautela. “Me he apuntado, pero eso no quiere decir que vaya a jugar. Dependerá de cómo acabe mi cuerpo aquí en Aloha el fin de semana”. Un pasito más …

 

– Jiménez se echa a la arena (-3): Todos saben que Miguel Ángel Jiménez es un gran tipo, muy querido en el circuito. También todos saben que es un gran sacador de búnker. Si unimos estos dos factores nos encontramos imágenes con las del hoyo 17. Jiménez hace una sacada de búnker con la que salva el par y después se pone a rastrillar el búnker, una misión que habitualmente queda para los caddies.

 

– El caddie de Felipe Aguilar y las vacaciones (+5): Lo primero que hacen los caddies nada más terminar una vuelta es devolver a pie de green el peto rojo que llevan con el nombre del golfista a la espalda. Allí se produjo una curiosa conversación entre el veterano miembro del Circuito Europeo y el caddie de Felipe Aguilar. Al devolver el peto, le dice el responsable del Circuito que lo revise bien no vaya a dejarse un lápiz, un tee o algún objeto que tenga que utilizar al día siguiente. El caddie de Aguilar le dice que lamentablemente no habrá día siguiente. “Pues entonces, que disfruten el fin de semana”, aseguró el hombre. Diga usted que sí, hay que ser positivos.

 

– Gonzalo Fernández Castaño jugó ayer un gran golf (-1): El madrileño hizo siete birdies. Al acabar la ronda, su entrenador, José Carlos Gutiérrez le dice: “has jugado fenomenal. Fallar, lo que se dice fallar, sólo has fallado un golpe”. A lo que responde Gonzalo: “han sido dos”. Y ahí los dejamos discutiendo.

 

– El sufrimiento de un padre, por Pablo Martín (-4): El malagueño juega en casa y en cada ronda va a acompañado por familia y amigos. Su padre vive cada golpe de su hijo como si fuera un gol. Es su mejor y más fiel seguidor. Cómo disfrutó con un extraordinario globito del niño en el green del 6 que a punto estuvo de embocar.  

 

– Carlos Balmaseda, muy tocado (Descalificado): Al madrileño, aún desolado por no haber podido seguir en el torneo, se le vio por el putting green, quitándose el ‘mono’ y aprovechando que la rodilla le ha respondido bien. Balmaseda aseguraba ayer que “estoy muy tocado porque este es el torneo que más ilusión me hace jugar y me pasan unas cosas…”.

 

– El protagonismo de un municipal: Alejandro Larrazábal, golfista y manager de su hermano Pablo Larrazábal, sufrió ayer las consecuencias del excesivo protagonismo que quiso tener un policía municipal. Cargó con una multa que nadie puede explicarse por una tontería sobre el aparcamiento y en principio debería declarar el miércoles en un juicio rápido. Un sinsentido, vaya.

 

– El hierro 1 de Suneson (-5): Carl Suneson asegura que disfruta mucho en Aloha y una de las razones es por la gran cantidad de veces que puede sacar a pasear su hierro 1, uno de sus palos favoritos. “Simplemente, mi hierro 1 es mucho más recto que mi driver o mi madera 3”.