Inicio Noticias ALOHA, A RAS DE ROUGH (III)

ALOHA, A RAS DE ROUGH (III)

Compartir

La intrahistoria de la tercera ronda del Open de Andalucía

Image

Álvaro Velasco espera su turno en el green del hoyo 16

– Álvaro Velasco, ejemplo de autocontrol (-4): El catalán iba camino de protagonizar una de las tarjetas del día…

En el hoyo 12 iba -4 en el día y estaba jugando como los ángeles. Espectacular su drive de salida en el 14 (par 4), que se posó a escasos diez metros de la entrada del green, y grandísimo tiro de salida en el 17 (par 3) con viento en contra. La bola botó a pocos metros del green y rodó hasta pararse a dos metros y medio de bandera. Las sensaciones eran de vueltón de Velasco. Pero un bogey en el 13 y otro en el 18 dejaron su ronda en -2 y -4 total. Cualquier otro jugador habría salido del green del 18 con malas pulgas, jurando en hebreo por su mala suerte y con muy pocas ganas de hablar con nadie. Sin embargo, Velasco dio una lección de autocontrol, serenidad y carácter, del bueno claro. Salió de la carpa de recogida de tarjetas con una sonrisa en la boca y atendiendo a todo el que reclamaba su atención. Un diez para Álvaro. 

 

– La embarazosa situación de Sion Bebb (+2): Gonzalo Fernández Castaño estaba dándole vueltas a la línea de su putt en el hoyo 5. Anthony Wall, su compañero de partido, tres cuartos de lo mismo. En estas, cae una bola del cielo en pleno green y se marcha despacito hasta el antegreen. Respingo de Gonzalo y Wall ante la inesperada situación. No, no era de un jugador despistado del partido que iba detrás que se había adelantado. No, la bola procedía del tee del hoyo 1 y su dueño era el galés Sion Bebb. El golfista había hecho un hook estratosférico. Apareció en el green de forma sigilosa, dejando jugar primero a Larrazábal y Brier, que ejecutaban su segundo golpe desde calle. Después tiró Bebb y la bola tenía muy buena pinta. Los aficionados dispensaron una merecida ovación al bueno de Bebb, que estaba pasando una rato bastante malo. Por cierto, óle por Bebb, que hizo el par en el 1.

 

– Clarke y Bjorn practicaron su putt en Aloha (no pasaron el corte): Thomas Bjorn y Darren Clarke no consiguieron pasar el corte en Aloha. Sin embargo, a los dos se les pudo ver el sábado por la mañana en el putting green poniendo a punto su juego corto. Bjorn se cruzó con Olazábal y bromearon. El entrenador de Bjorn estaba sujetándole la cabeza al danés con la mano para evitar que la levantara a la hora de patear. Llegó Olazábal por detrás y también le puso la mano en la cabeza provocando la risa de ambos.

 

– Un aficionado muy profesional: El partido de Pablo Larrazábal y Markus Brier contó con muchos seguidores, pero hubo uno de excepción. El aficionado estaba siguiendo cada golpe andando y con una bolsa de palos al hombro. Eso es afición y profesionalidad.

 

– La sinceridad y generosidad de Jiménez (-6): Es muy habitual escuchar a un jugador después de una vuelta decir que podía haber hecho muchas menos de no ser por este o aquel putt. Lo más raro es escuchar lo contrario y se lo pudimos oír a Jiménez: “En el 17 y 18 he fallado putts desde unos 4 metros. La verdad es que no las he dejado cerca y tal vez debían haber sido menos 5”. Tras la rueda de prensa, recibió un homenaje en nombre de la Asociación de los Niños Mariposa, con quien colabora desde hace cinco años.