The Players Championship (8 – 11 mayo)
Sergio García mira al cielo, levanta su putter y le planta un beso cargado de emoción y rabia…
El español acaba de ganar su primer grande, vale, es el llamado 'Quinto', pero aquí nos vale a todos igual.
Se trata, sin duda, de la imagen de la temporada, el gran momento del golf español, el instante más emocionante desde que José María Olazábal ganó su segundo Masters allá por 1999.
Pocos recordarán que Sergio prácticamente estrenaba un nuevo driver en este torneo. Ayudó lo suyo, claro que sí, pero si hay algún responsable de esta gran victoria es su putter. Funcionó como un reloj en la última vuelta. Metió putts increíbles, ganadores… El de birdie del 12, el de birdie del 14…
Pero si alguno se quedará en la retina es el del 18, hoyo traicionero donde los haya. Sergio estaba a un golpe del líder, Paul Goydos. El trabajo con el gurú del juego corto, Stan Utley, daba sus frutos. Necesitaba el birdie, pero incluso el par podía bastarle para, al menos, ir al playoff. Él lo sabía. El birdie se puso imposible y salvó un par extraordinario, con un delicadísimo putt que entró por todo el centro. Su celebración fue la antesala de la victoria. Goydos hizo bogey, playoff y todos al hoyo 17.
En España apenas quedaban ya uñas que morder y encima el 17, donde sólo se ve agua desde el tee. Goydos se estrelló contra el líquido elemento y abrió la puerta a Sergio. El de Borriol conectó un golpe soberbio. La bola no sólo alcanzó el green, se quedó a menos de un metro del hoyo. Ya estaba hecho.
El The Players ha sido, sin duda, el punto culminante de una temporada extraordinaria de Sergio García, rematada con el número 2 del mundo. Se ha establecido como la alternativa más consistente al número 1, Tiger Woods.
Ya lo dijo nada más terminar el torneo: "No me quiero quedar estancado aquí. Quiero tener un buen año, darme oportunidades de ganar torneos y de ganar algún grande, si puedo". Dicho y hecho. Así fue.
Aquel The Players era sólo el principio…
