El golf es uno de los deportes que más ha crecido en los últimos años, gracias a la inversión realizada tanto por la administración privada como por el sector público. De esta manera, se han generado infraestructuras necesarias para democratizar el acceso a campos, materiales, torneos, etc.; algo que tiene como resultado directo un aumento considerable del número de jugadores tanto en España como en el resto del planeta.
Sin embargo, el golf también atraviesa por un momento de transformación y adaptación, especialmente debido al desarrollo que ha tenido la tecnología a todos los niveles. Gracias a ello, los reglamentos están cambiando para dar pie al empleo de herramientas tecnológicas que eran impensables hace una década, aunque esto también puede llegar a modificar aspectos esenciales de este deporte y requiere de una reglamentación mucho más precisa.
Una tendencia que lleva muchos años desarrollándose en otros sectores
Eso sí, merece la pena destacar que este proceso de innovación tecnológica no ha afectado tan solo ha la industria del deporte, sino que lleva muchos años influyendo directamente en todos los sectores. Uno de los ejemplos más notables tiene que ver con la industria del ocio y el entretenimiento, donde este tipo de cambios se han producido con una velocidad vertiginosa.
Las plataformas de streaming, el comercio electrónico o el eGaming son los tres casos más notables en este ámbito, debido a que se han convertido en grandes motores económicos de esta industria y cuentan con pronósticos de futuro muy favorables. La razón principal tiene que ver con la diversificación empresarial, que ofrece al usuario una amplia variedad de oferta y estrategias de marketing destinadas a llamar su atención. Así, cualquier bono sin depósito se convierte en una oportunidad en la que ganan tanto la compañía como el cliente, ya que aumentan las personas que se deciden por este sector y el consumidor cuenta con una relación calidad-precio que es muy difícil de igualar fuera del ámbito digital.
Por supuesto, esto también repercute en el golf y en su repercusión mediática, algo que le permite llegar a una mayor cantidad de gente con una menor inversión económica. De hecho, todo el crecimiento que ha experimentado este deporte sería impensable sin valorar este aspecto, que seguirá produciéndose durante los próximos años.
La transformación de palos y bolas, un “peligro” que necesita ser abordado
Finalmente, no podemos pasar por alto que este tipo de cambios suponen una oportunidad de crecimiento, pero también influyen directamente en las dinámicas del propio deporte. Un ejemplo que lleva muchos años en la mente de los amantes del golf tiene que ver con el desarrollo de los palos y las bolas, que acaban primando la fuerza por encima de la habilidad del deportista.
Incluso Tiger Woods hablaba de esta problemática hace unos años, lo que vuelve a demostrar que la influencia tecnológica lleva un tiempo asentándose en este deporte. Aun así, el futuro parece bastante prometedor, ya que cuanto más se practica un deporte a nivel amateur, mayor es la calidad de sus profesionales en el futuro inmediato.
