Lorena Ochoa y su eterna rival Annika Sorenstam no se las verán este año en el golf de Palm Desert, cosa que lamenta mucho la mexicana…
Ochoa, quien hace un año remontó un déficit de tres golpes para vencer en la última jornada a Sorenstam, dijo lamentar que no la verá ahora, aunque está de acuerdo con su decisión de no participar en el evento, debido a una lesión.
"Lo que le pasó es comprensible, la forma en la que se lesionó y luego trata de tomarse las cosas con calma y no participar en tantos torneos", dijo Ochoa, quien ha sucedido a Sorenstam como la número uno en el tour estadounidense.
"Ella ha tenido muchos problemas. Por supuesto que la extraño y no solamente yo, sino muchas jugadoras y los patrocinadores. Estoy segura de que a todos nos gustaría tenerla aquí. Pero regresará. Está preparándose para empezar a jugar más semanas seguidas al golf y cobrar un buen ritmo para dar resultados", dijo.
Sorenstam, cinco veces ganadora del evento, declinó una invitación a participar en el certamen que se inicia el jueves en el campo del Big Horn Golf Club. Luego de haber iniciado el año con lentitud y haber perdido tiempo ante problemas de espalda y cuello, no resultaba elegible para formar parte del cuerpo de 20 jugadoras de elite, hasta que los organizadores cambiaron el criterio de elección la semana pasada.
Eliminaron la opción de exceptuar de los requerimientos mínimos para la jugadora aficionada del año en Estados Unidos, algo que no habían hecho en nueve años, abriéndola a una miembro activa del Salón de la Fama de la LPGA en el país.
Ello le hubiera permitido participar a Sorenstam, ocho veces jugadora del año, dándole otra figura al torneo.
Pero Sorenstam no deseaba tomar un lugar que le correspondería a otra jugadora, de acuerdo con Mark Steinberg, indicó su agente y jefe de la división de golf de la agencia de representantes IMG.
