Jack Nicklaus es, sin duda, uno de los personajes más idóneos para analizar la situación por la que atraviesa actualmente Tiger Woods. Es un gran campeón como Tiger y también atravesó por algún otro túnel del que salió aún más reforzado. Además, si hay algún objetivo por cumplir en la vida deportiva de Woods es el de alcanzar y superar los 18 majors conquistados por Nicklaus.
Es, por tanto, una voz autorizada y lo ha demostrado hoy mismo, con su habitual mesura y contundencia, en Golf Channel. Sobre la situación que atraviesa Tiger, el ‘Oso Dorado’ tiene claro que «su problema está más entre sus dos orejas que en cualquier otra parte de su cuerpo«. Nicklaus se muestra más que convencido de que el problema de Tiger Woods es mental y que él mismo es el único que lo puede superar.
Nicklaus habla por experiencia propia. También tuvo problemas durante su carrera, y algunos muy parecidos a los de Tiger. «Recuerdo que en 1979 estaba muy mal. Fue el peor año de mi carrera y lo pasé fatal con el juego corto. Era incapaz de hacer un chip bueno. Estaba fatal, horrible«, señala. En aquel momento, salió del supuesto agujero con una doble receta: un consejo de juego corto del campeón del PGA Tour Phil Rodgers y la victoria en el US Open. Aquel consejo de su compañero le ayudó a ganar el torneo en 1980, con 42 años, y consiguió pasar página. «Tienes que ir dejando las cosas malas atrás y necesitas que te ocurra algo bueno para cambiar la dinámica. Aquella cosa positiva para mí fue el US Open, pero claro, para llegar hasta aquí tuvo que mantener la cabeza llena de pensamientos positivos y eso es lo que debe hacer ahora mismo Tiger», señala Nicklaus.
Si hay algo que tiene claro Nicklaus es que no hay un entrenador que vaya a sacar ahora mismo a Woods del atolladero en el que se encuentra. «Es algo que tiene que hacer por sí mismo, porque un entrenador no se puede meter dentro de su cabeza», explicó.
En cuanto a la posibilidad de que algún día pueda superar su registro de 18 grandes, Nicklaus alberga, como todos, cada vez más dudas. «Quizás sí, quizás no. Evidentemente, hace cinco años tenía más opciones, pero pienso que aún tiene mucho golf por delante para conseguirlo. El tiempo, de momento, sigue estando de su lado».
