Pablo Martín Benavides ha causado sensación en su primera irrupción en un grande. El malagueño acabó trigésimo el US Open, su segundo torneo como profesional. En un campo durísimo, donde cayeron jugadores de la talla de Phil Mickelson, Adam Scott, Luke Donald o Sergio García, Pablo supo manejarse a las mil maravillas. Superó la presión de jugar delante de Tiger Woods, con el público encima y se permitió el lujo de terminar los últimos nueve hoyos de Oakmont bajo par. ¡Un crack! …
Pocas horas después de su hazaña, mientras prepara en Oklahoma su próxima participación en el Buick, Pablo Martín atendió en exclusiva a Ten-Golf con su sencillez y buen humor habitual.
Jugar al lado de Sergio García y José María Olazábal…
Cuando el padre de Sergio, Víctor, me dijo que salía con Sergio y con Txema la semana anterior estando en Memphis, creía que me estaba tomando el pelo. Creía que estaba de broma conmigo y me aposté una cena con él a que no era cierto… Y sí, la perdí! La verdad es que fue increíble poder jugar en mi primer Open con Sergio y Olazábal. Para mí fue como un sueño. Fue un gesto muy bonito por parte de la USGA.
El gran gesto de la USGA…
Podría ser que nos pusiera juntos como homenaje al golf español… Sin duda, a alguien de la USGA le debo caer bien!! jaja… Para mí fue un gesto impresionante porque normalmente no suelen poner a muchos paquetes como yo en los grupos buenos, con los mejores jugadores. Y ciertamante debe ser complicado para los jugadores nuevos aprender y sentir la presión de salir justo delante de Tiger, con todo el público alrededor y de la mano de dos de los favoritos para ganar el torneo. Fue una experiencia inolvidable de la que sin duda pude aprender muchas cosas.
Su primer encuentro con Tiger Woods…
Me llamó la atención Tiger. Incluso sabiendo lo bueno que es. En televisión parece fuerte, pero su físico me impresionó muchísimo. ¡Es como un jugador de fútbol americano! También me llamó muchísimo la atención la cantidad de público que hay en el torneo incluso los días de entrenamiento.
Sobre la dureza de Oakmont…
Bueno, aquí hay opiniones para todos los gustos. A mí me parece genial. Creo que es una semana diferente a las demás. Creo que el campo no era injusto. Hay calles, greenes y hoyos como en todos los demás campos. Creo que el jugador se tiene que amoldar al campo dependiendo de las dificultades que ponga. La sensación de incomodidad que el campo transmite en cada golpe es parte del juego. Sin duda ha sido uno de los campos más difíciles que he jugado, especialmente con el tiempo tan bueno que hizo. La difierencia es que no te puedes despistar en ningún momento y cada fallo que cometes lo acabas pagando, y si se empiezan a acumular, te enfadas y pierdes un poco la perspectiva, fallas un par de calles y un par de putts y acabas jugando ¡a no romper 80!
El Oakmont español..
Bueno, Valderrama quizá sea parecido. Es un campo totalmente distinto, pero las sensaciones que el jugador debe sentir pueden ser parecidas. Se pueden hacer vueltas bajas, pero es muy fácil que se te salga la cadena.
Siempre con los pies en el suelo…
Nunca se me pasó la cabeza estar peleando con los arriba, qué va. Es una semana muy larga y hay muchas otras cosas a tu alrededor como para empezar a pensar en que voy a ganar el torneo después de la primera vuelta.
Su primer capricho con el cheque del US Open..
¡¡Anoche, cuando estaba tiraísimo en el aeropuerto me pegué mi festival solitario con unas costillas con patatas fritas y una cervezita al más puro estilo americano!! Jaja…
El fichaje por Nike y cómo adaptarse a los nuevos palos…
No para nada, no es como empezar de cero. El material que tiene Nike es muy bueno y demostrado está al ser ya la marca con más victorias en el circuito americano, en parte gracias a Tiger. Tuve la oportunidad de ver la fábrica hace un tiempo y me impresionó la calidad de sus productos, la gente que forma la compañía y los objetivos que tienen. Depende de cada jugador, pero con tan buenos materiales no tardaré en encontrar palos que mejoren mi juego.
Sensaciones tras el US Open…
Muy buenas sensaciones. Primero la felicidad de cobrar mi primer cheque como profesional. Segundo me llevo todo lo que aprendí en esta semana y finalmente me llevo las ganas de trabajar más duro y mejor para dentro de no mucho estar compitiendo por esos torneos.
Los planes de Pablo Martín…
El próximo torneo que juego es el Buick en Michigan la semana que viene, después las previas del Open Británico en Detroit y justo después el AT&T en Washington Dc; después Escocia, ojalá el Open Británico también y el Deutsche Bank en Alemania. Dos semanas de descanso en Málaga y vuelta a más torneos en el circuito europeo y alguno del circuito americano.