Tiger Woods acaba de anunciar a través de su web oficial que pone fin a su relación laboral con el entrenador Sean Foley, con quien venía trabajando desde el año 2010.
El jugador californiano confirma de esta manera un rumor creciente en el circuito americano, un rumor, por cierto, que apunta también a que podría volver en un futuro cercano con Butch Harmon, su primer entrenador, aunque el gurú lo ha desmentido ya en varias ocasiones. Precisamente, hay que destacar el gesto de Harmon, cuya primera valoración de la noticia ha sido: «en defensa de Sean diré que yo tuve el trabajo más fácil porque durante mis diez años fue el Tiger mejor de salud. Sean ha tenido el trabajo más duro».
Así las cosas, Tiger está ya a la caza y captura de su cuarto entrenador, tras haber estado con Harmon, Hank Haney y Foley. “Quiero agradecer a Sean por su ayuda en el trabajo y su amistad. Es uno de los mejores entrenadores que hay en la actualidad y estoy convencido de que seguirá teniendo muchos exitos con los jugadores que dirija. Era el momento justo para tomar esta decisión, ya que no volveré a jugar hasta diciembre”, explica Tiger en su comunicado.
Del mismo modo, Foley señala que “sólo tengo palabras de agradecimiento, admiración y respeto hacia Tiger Woods. Era una ambición mía entrenar al mejor jugador de todos los tiempos y aprecio mucho que me haya dado la oportunidad, así como la gran cantidad de experiencias que hemos compartido”, explica.
Por otro lado, Tiger asegura que no tiene ninguna prisa para rellenar el hueco que acaba dejar Foley en su estructura deportiva.
