Jake Beber-Frankel ha hecho este miércoles la vuelta más baja de la historia del Boys Junior PGA Championship. Ha entregado una tarjeta de 60 golpes en la segunda ronda del torneo. Un resultado de película que tiene muchas papeletas de acabar en el cine. Más allá de que cualquier historia más o menos épica es carne de Hollywood, el chico lo lleva en los genes.
Es el hijo de David Frankel, un conocido y premiado cineasta, director de películas como El Diablo se viste de Prada o Belleza oculta, así como de dos capítulos de la exitosa serie El Séquito. Además, el abuelo de Jake es premio Pullitzer y fue editor ejecutivo del New York Times. No habrá problemas para encontrar en su familia a alguien que escriba el guión.
Jake, que ya se ha comprometido para estudiar en Stanford, firmó los 60 golpes en el recorrido Keney Park Golf Course de Hartford, superando por uno el anterior récord, propiedad desde el año pasado del ya famoso Akshay Bhatia (ha jugado torneos del PGA Tour). Eso sí, Bhatia sigue teniendo en su poder el registro más bajo sobre el par (-11), ya que lo de Beber-Frankel fue en un par 70.
Hay que decir que por este prestigioso campeonato de la PGA han pasado los mejores jugadores del mundo, caso de Tiger Woods, Phil Mickelson, Jordan Spieth o Justin Thomas, por citar sólo algunos nombres. Así las cosas, el bueno de Beber-Frankel, a sus 17 años, se ha ganado ya la atención de todos. Veremos, eso sí, si puede rematar su actuación con una victoria. De momento, marcha segunda detrás de Canon Claycomb.
