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Una oportunidad única de jugar al golf como hace cien años

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Miguel Carrasco y Freddy Lilly. © Federación de Golf de Madrid
Miguel Carrasco y Freddy Lilly. © Federación de Golf de Madrid

Freddy Lilly y Miguel Carrasco se embarcaron en esta aventura en el año 2016. Jugaron un torneo de golf en Zarauz, patria y campo de Lilly, como si el reloj se hubiera detenido en 1920. Con palos de entonces, bola de entonces, ropa de entonces, reglas de entonces… Un desafío precioso al que se apuntaron entre otros, José María Olazábal.

Aquel día, los dos se miraron a los ojos, y decidieron que había que seguir promoviendo este tipo de torneos. Viajaron a Gullane, Escocia, y participaron en el Campeonato del Mundo de Hickory, nombre que procede del material con el que estaban hechas los palos de golf antaño. El gusanillo se les metió en el cuerpo y fruto de esta pasión por el golf y la historia decidieron poner en marcha diferentes pruebas por España.

A finales de abril tendrá lugar el I Open de Extremadura Hickory Clásico, en el campo de golf Isla de Valdecañas y el 15 de mayo se jugará el primer Campeonato de Madrid abierto de Hickory. Tendrá lugar en el Club Villa de El Escorial. “Será un torneo abierto a todos, incluido niños, con unos pocos requisitos mínimos”, comenta Lilly en un bonito reportaje publicado en la Federación de Golf de Madrid, “se tienen que usar palos anteriores a 1930, con varilla hickory, y un atuendo adecuado de todo el que participe”.

Los requisitos son sencillos. Hay que jugar al golf como se hacía un siglo atrás. “No se podrá usar guante, ni medidor, ni tees… bueno, igual con los niños somos más benévolos, pero de lo que se trata es de vivir la esencia del golf de antaño”, añade Carrasco la FGM.

Aunque lo pueda parecer, encontrar el material de la época no es tan complicado. Así lo explica Carrasco. “La bola tiene que ser de compresión inferior a 50. Cualquier bola tipo “soft” cumple el requisito. Y hay un gran mercado de palos de época. Hay que tener algo de cuidado, por el estado y su antigüedad, pero los fabricantes más renombrados de entonces, como James Anderson -este tenía como sello distintivo una flecha- o Robert Forgan -que utilizaba una bandera como marca en la cabeza del palo- entre otros muchos, son fácilmente distinguibles, y hay muchos y de variados precios en internet”.

En cualquier caso, si no tiene, no encuentra o no quiere comprar palos de la época, también se pueden pedir para los torneos este mail de contacto: info@hickoryclubs.eu

En el Campeonato de Madrid se jugarán 36 hoyos por la mañana y un torneo por parejas por la tarde. Y es que el ritmo de juego también debe ser como el de la época. “No deberíamos tardar más de tres horas en completar los 36 hoyos por la mañana”, asegura Lilly. Y entre medias, una barbacoa.

Este fin de semana tocará adelantar el reloj para adaptarnos al nuevo horario de verano. El golf le ofrece también la posibilidad de atrasarlo no una hora, sino cien años, para vivir el golf como hacían nuestros antepasados. No lo pierdan.