Podemos imaginar perfectamente a Álvaro Quirós tomándose cumplida venganza futbolera en St.Andrews esta semana, después del aperitivo de las semifinales vividas en Loch Lomond…
Resulta que buena parte de la Armada sufrió en sus carnes el 1-0 ante Suiza en Pebble Beach. Era el estreno mundialista de nuestra selección y el partido, si no recuerdo mal, comenzó a las siete de la mañana en el intempestivo horario de la costa Oeste norteamericana.
"Tal y como ha sido el partido, esto pasa una de cada cien veces", nos decía Sergio García, por ejemplo, en plena calle de prácticas de Pebble Beach.
La guasa era evidente entre los compañeros golfistas de otras nacionalidades… Memorable, por ejemplo, fue el encuentro entre Sergio y Stenson, horas más tarde, con bailecito incluido del sueco celebrando la victoria de Suiza para picar al de Castellón…
Los argentinos, con Cabrera a la cabeza, tampoco perdieron la ocasión de 'cebarse' con los nuestros. Y Jiménez, cuyo triunfo en París siguió al pase a semifinales, andaba algo tocado. "España ha jugado bien, como sabe, pero yo veo que otras selecciones están mejor puestas atrás, ¿no?". Gracias a Dios, esta vez el malagueño no anduvo acertado.
Pero quizá fue Álvaro Quirós quien más fue a la guerra. Como el de Guadiaro no teme el 'cuerpo a cuerpo', algunos aprovecharon para darle fuerte con la derrota de España. "Es que me tienen frito, me están dando por todas partes", nos decía con gesto ciertamente agobiado. Kaymer, gran amigo suyo, fue uno de los que no se cortó un pelo… Después Alemania caería ante España en semifinales la pasada semana mientras ambos estaban en Loch Lomond. Prometemos contarles la 'vendetta' de Álvaro con pelos y señales.
"Bueno, bueno, ya me contaréis lo que pasa al final, que esto es muy largo. Vamos a ver dónde acaba España y ya hablamos…" decía Quirós, allá en Pebble Beach. Bendita amenaza.
