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El espectador Bryson, el reto de Phil y el no dilema de Tiger

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© PGA America
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Jim Furyk no quiso decir que se la habían puesto botando con las invitaciones para la Ryder Cup, pero casi… “No diría que ha sido fácil, pero sí es obvio que lo podría haber tenido más difícil”, aseguró. DeChambeau, Mickelson y Woods. Por aclamación. Cero discusión. No sólo eran el Número 9, 10 y 11 de la lista, es decir, los siguientes en el ránking, sino que además DeChambeau es el jugador más en forma del mundo en este momento y Tiger y Phil están jugando muy bien y además tienen hambre. Eso sí, cada uno tiene su historia.

Furyk no se sale del guión: DeChambeau, Tiger y Mickelson

Seguramente, la de DeChambeau es la más curiosa. Hace dos años ya estuvo en Hazeltine, aunque entonces como espectador. Acudió dos días a ver la Ryder Cup a Minnesota para impregnarse del ambiente, captar las emociones, las sensaciones. En definitiva, quería ver cómo era aquello, convencido de que algún día él estaría al otro lado de las cuerdas. DeChambeau fue casi de incógnito, aunque acabó siendo detectado. “Fue curioso. Creo que era un par 3. Estaba en el tee, viendo a los jugadores y de pronto vi que Davis Love III me estaba mirando. Me dijo: “¿Eres Bryson?” Le dije que sí, que había ido a apoyar a ver lo que se sentía y me pidió que me me metiera dentro de las cuerdas. Fue un gran gesto de su parte”, señaló. Dos años después, DeChambeau volverá a la Ryder Cup, pero esta vez como miembro del equipo y quién sabe si formando pareja con Tiger Woods.

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Mickelson es el incombustible, “el rookie” le llamó ayer con una sonrisa Tiger Woods. El de San Diego pensaba que la pasada Ryder de Hazeltine había sido la última, pero su clase es eterna y, sobre todo, nadie le ha regalado estar en el equipo. Se lo ha ganado. No olvidemos que este año venció en el WGC México Championship. Aún le quedan desafíos por cumplir, pese a jugar en París su Ryder número doce. No se ha perdido ninguna desde 1995. El desafío no es otro que ganar en suelo europeo, algo que Estados Unidos no ha podido hacer desde hace 25 años. Es el mantra que repiten todos en el equipo. La gran motivación.

Conjeturas y certezas sobre las elecciones de Bjorn

Por su parte, Tiger Woods regresa a la Ryder seis años después. Tiene el mismo reto que Phil Mickelson, ganar de una vez en Europa. También lo dijo ayer. No obstante, la historia de su elección es aún más curiosa. Desde principios de año, Woods era vicecapitán del equipo junto a Davis Love III y Steve Stricker. Es decir, estaba metido en la sala de máquinas, diseñando estrategias, analizando rendimientos, pensando en posibles parejas para Francia, hablando con jugadores, motivando, escuchando… Sin embargo, justo después del PGA Championship, donde Tiger peleó por el triunfo hasta el final, se reunieron el capitán y los vicecapitanes, Tiger entre ellos, y le dijeron: “te dejamos que elijas: ¿prefieres ser vicecapitán o jugador?”. “No tuve ninguna duda…”, señaló ayer Woods entre risas. No había dilema alguno.

Duval, Zach Johnson y Kuchar, elegidos vicecapitanes

Tras la baja como vicecapitán de Tiger, Furyk anunció el nombre de tres nuevos vicecapitanes: David Duval, Zach Johnson y Matt Kuchar. Ya sólo resta para completar el equipo el jugador Número 12. Prácticamente, nadie duda de que será Tony Finau, y mucho más después de que uno de sus grandes alternativas, Matt Kuchar, fuera elegido ayer vicecapitán. Furyk lo anunciará el próximo lunes.

Por cierto, en cuanto a las posibles elecciones de Europa, Furyk prefirió no comentar nada. «Estoy ansioso por saber lo que decide Thomas Bjorn, pero prefiero no presuponer nada. Tengo una idea en la cabeza de lo que podría hacer Europa, pero no me voy a adelantar. Le tengo muchísimo respeto a Thomas y al equipo europeo, pero ahora mismo estoy más centrado en nuestras fortalezas», señaló.