Contra las cuerdas llegó Jon Rahm al hoyo 18 del Marco Simone Golf Club en su partido contra Scottie Scheffler, primero de los 12 duelos individuales del domingo en la Ryder Cup. El de Barrika marchaba uno abajo en el marcador, después de que el estadounidense perdonara un ‘match ball’ en forma de putt para birdie en el 17, dándole una última oportunidad al equipo europeo de salvar al menos medio punto.
Fue entonces cuando emergió imponente la figura de uno de los deportistas españoles más importantes de la historia. Jon jugó un hoyo 18 antológico. Drive monumental al centro de la calle, hierrazo a green de dos, en este larguísimo par cinco que cierra el campo romano, y un putt estratosférico desde más de 20 metros para dejar la bola parada a un palmo del hoyo. Su trabajo estaba hecho.
Le tocaba esperar el error de Scheffler, que llegó desde el tee y en el golpe de aproximación. La salida del estadounidense se fue muy por la derecha, pero la fortuna le acompañó con un bote que devolvió la bola al rough, junto al primer corte, pero accesible. Sabía que tenía que arriesgar y buscó el green de dos, pero su tiro se fue a la derecha, de nuevo al rough. Y su intento de recuperación salió suelto, se pasó de green y acabó de nuevo en la hierba alta, esquivando el agua de milagro.
Scenes at the 18th after @JonRahmpga secures a half point for Europe! 🇪🇸#TeamEurope | #RyderCup pic.twitter.com/ikzKy3sNrf
— Ryder Cup Europe (@RyderCupEurope) October 1, 2023
El Número Uno del mundo necesitaba embocar su chip para mantener el rojo en el marcador y sumar el primer punto del día para Estados Unidos. No lo logró, se le fue por la derecha, y Rahm, después de un día de muchísimos nervios y alternativas, consiguió arañar medio punto trascendental para acercar a los chicos de Luke Donald a los cuatro que necesitan para recuperar la Ryder. Con el de Hovland, que ganó su partido a Morikawa, encarriló un camino que sus compañeros intentarán refrendar durante la tarde. No extraña la efusiva celebración del español…
