Jason y Day y Scott Piercy lideran el Bridgestone después de tres jornadas con un acumulado de -5. Es increíble que el australiano terminará ahí arriba y, aún más, que fuera capaz de firmar una tarjeta de 69 golpes, una por debajo del par. Desde el tee anduvo horroroso (sólo cogió tres calles) y, lastrado de ese modo, después cazaba poco más de la mitad de los greenes en regulación. Sin embargo, sólo le cayeron dos bogeys y uno de ellos fue después de sumar tres putts… Su juego corto le salvó y le ha dejado en disposición de sumar su cuarta victoria de la temporada. Los precedentes no pueden ser más favorables, puesto que cantó victoria las últimas cinco veces que se plantó en la última ronda como líder.
Junto a él saldrá en el partido estelar Piercy, en busca de su cuarto triunfo en el PGA Tour y de alargar un momento dulce que ya dura más de un año. El de Las Vegas, que no se consolidó en el mejor circuito del mundo hasta pasados los treinta, fue segundo en el US Open hace unas semanas, consiguiendo en Oakmont su segundo top ten en un Grande (ya fue 5º en el PGA de 2013).
Pero la situación está realmente apretada y son más los candidatos en un domingo que se promete apasionante. Para empezar, hay que contar con Dustin Johnson (-2), que entregaba la mejor tarjeta del día (66), sin olvidar al sueco David Lingmerth (-4), que desgraciadamente para sus intereses no puede sumar ni un solo punto de cara a la Ryder, que era uno de sus objetivos este año (eso que sale ganando Rafa Cabrera Bello, entre otros). Jordan Spieth (PAR), sin embargo, quedaba ligeramente descolgado tras firmar un triple bogey en el 16. Pinche aquí para consultar resultados.
