El Programa de Golf de Alto Rendimiento de la Universidad de Málaga ya está en la rampa de salida.
Cuando apenas quedan unos días para el inicio de la primera edición de esta novedosa iniciativa en España se ultiman los detalles con constantes reuniones de trabajo. Hoy vamos a abordar el apartado mental del programa.
En esa búsqueda innegociable de la excelencia, patrón del proyecto desde el primer día, los responsables del University Golf Program han decidido confiar este aspecto esencial en la formación del deportista a Rocío Pomares, psicóloga malagueña que en unos años se ha convertido en una de las referencias en España.
Pomares se especializó en el deporte hace cinco años y por su gabinete pasan en estos momentos cerca de cien deportistas de todas las disciplinas, aunque podríamos decir que el golf es una de sus especialidades. También juega. Apuesta por la psicología como ciencia y tiene muy claro el método que implantará en el Programa. Su punto de partida será algo que bien podríamos llamar como la Prueba del 7 de la psicología deportiva, una técnica científica importada de Estados Unidos mediante la que se obtiene una radiografía perfecta de cómo responde la cabeza del jugador durante la competición. “El objetivo es detectar los puntos fuertes y débiles del golfista y a partir de ahí, trabajar de manera específica para poder obtener el máximo rendimiento. Los resultados se consiguen mediante 42 preguntas que han sido testadas científica y empíricamente”, explica Rocío.
De este modo, lo primero que se encontrarán los alumnos del UGPM será la Prueba del 7. Consiste en detectar las habilidades mentales de cada jugador en siete aspectos fundamentales de la competición, que son los siguientes:
1. Nivel de motivación
2. Control del afrontamiento negativo (cómo encaja los malos momentos)
3. Control del afrontamiento positivo (cómo encaja los buenos momentos)
4. Control actitudinal (los hábitos que tiene durante el juego)
5. Nivel de confianza
6. Capacidad de atención y concentración
7. Visualización
Como decimos, mediante 42 preguntas se realizará una radiografía perfecta del perfil de cada jugador y se empezará a trabajar. “Será una primera evaluación para saber dónde tenemos que hacer más hincapié a lo largo del año. Esta prueba se viene realizando con los mejores deportistas en todo el mundo y hay unos resultados que sirven de baremos para saber exactamente dónde estamos con cada uno. La máxima puntuación que se puede lograr en cada habilidad es 30 y todo lo que baje de 19 necesita ser trabajado y mejorado. Lo que esté por encima simplemente se potenciará”, apunta Pomares.
El método de trabajo de Rocío será igual de científico y exhaustivo. Se combinarán sesiones grupales con individuales, de manera que todas las semanas verá a los jugadores. “Las sesiones de grupo me gustan especialmente porque los jugadores aprenden mucho y descubren que sus miedos o dificultades son compartidas por otros muchos. También se dan consejos unos a otros que son muy útiles, tanto para quien lo recibe como para el que lo da”, asegura.
Así las cosas, Rocío Pomares se une a Emilio Pereira, preparador físico del European Tour, en este equipo de lujo que formado por el UGPM y que echará a andar en la tercera semana de septiembre con novedades importantes que ya les iremos contando.
