La revolución de Europa es una auténtica realidad. Las estrellas del Viejo Continente han dejado de ver a Estados Unidos como al mítico El Dorado. El último misil a la línea de flotación del PGA Tour ha vuelto a llegar desde Dubai, teledirigido por Rory McIlroy…
El joven norirlandés, Número 9 del mundo, ha asegurado hoy en las horas previas a la Final del Circuito Europeo, que hay muy pocas opciones de que juegue el The Players Championship en 2011. Es un palo duro, durísimo, al circuito americano. El The Players no sólo es el 'quinto grande' y la cita que más dinero reparte en el mundo. Es también el niño mimado del PGA Tour, su torneo.
La razones de McIlroy son aún más hirientes para los hombres de Tim Finchen, comisionado del circuito americano. “La semana previa al The Players voy a jugar en Quail Hollow (torneo en el que defiende título) y después hay grandes torneos en Europa. Tenemos el World Match Play en Finca Cortesín (torneo que ya jugó el año pasado) y el BMW de Wentworth una semana después (curiosamente, el torneo homólogo al The Players en Europa). Son dos grandes citas de la Race to Dubai y mi objetivo el año que viene es ganarla”, explica el talentoso jugador.
Otro que también podría perderse el The Players la próxima temporada es Graeme McDowell. El compatriota de McIlroy y ganador este año del US Open se alojó en Finca Cortesín durante el Andalucía Valderrama Masters y dejó entrever que jugaría en 2011 el World Match Play. Sea como fuere, su presencia aún no es oficial.
Kaymer ya dijo ayer que no se hará miembro del PGA Tour en 2011 y que apenas jugará dos o tres torneos más que este año en Estados Unidos. Westwood seguirá en Europa y no va a mover un pelo su calendario… La diáspora europea respecto a Estados Unidos es más que evidente.
Los cimientos del despacho de Finchen en Sawgrass tiemblan. ¿Reaccionará el circuito americano de alguna manera? Lo veremos…
