Tiger Woods se ha retirado del WGC Bridgestone Invitational durante la última ronda del torneo con evidentes muestras de dolor. El jugador californiano se marchó del recorrido Sur de Firestone justo después de pegar su golpe de salida en el hoyo 9.
Tiger explicó a un oficial del PGA Tour que el problema comenzó en el hoyo 2. «Fue al pegar mi segundo golpe desde el borde del búnker. Sentí un fuerte tirón en la espalda y el dolor ya no desapareció. Es en la parte baja de la espalda. No sé qué ha pasado». Se confirma, por tanto, que la lesión es en la espalda, en el mismo lugar que le obligó a pasar por el quirófano en marzo tras retirarse también en la última vuelta del Honda Classic.
Sea como fuere, se encienden de nuevo las alarmas en el entorno de Tiger. Prácticamente se da por seguro que se perderá el PGA Championship la próxima semana, aunque el jugador ha manifestado que su intención ahora mismo es viajar a Valhalla y allí probarse. Si no pudiera jugar, la opción de estar en la Ryder Cup se antoja ya una quimera.
Woods comenzó con birdie en el hoyo 1 y después su ronda ha sido bastante dura. Hizo bogey en el 3 tras marcharse al agua, en el 6 y doble bogey en el 7 tras fallar la recuperación desde el búnker.
