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Las otras historias curiosas del inicio del Gran Canaria Lopesan Open

Lo nunca visto en el European Tour: dar las salidas en 19 idiomas diferentes

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El Gran Canaria Lopesan Open tiene un ‘starter’, ya saben, la persona que se sitúa en el tee del 1 para anunciar a los jugadores y darles la venia para salir a jugar, muy especial. Se trata de Rafael Cabrera, y sí, por si lo estaban pensando, tiene mucho que ver con Rafa Cabrera Bello. Concretamente, es su padre. Quería ayudar en todo lo que pudiera al torneo y le hacía una ilusión especial este papel en el hoyo 1. Se ofreció a los organizadores y se aceptó con gusto su propuesta. Tan en serio se lo ha tomado que, en cierto modo, se puede decir que ha hecho historia…

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No ha sido una presentación más, ni un ‘starter’ al uso que anuncia a los jugadores en inglés y en español, no. Hay que decir que el señor Cabrera se lo ha currado de lo lindo. Lo va a hacer en los dos días en 19 idiomas diferentes, es decir, todos los que están representados esta semana. Aquí tienen la lista: inglés, austríaco, alemán, indio, chino, checo, italiano, japonés, coreano, danés, español, finlandés, holandés, polaco, francés, portugués, tailandés, sueco y afrikaner. No está mal. Se lo ha llevado preparado y ha sorprendido a todos los jugadores. Nunca antes se había hecho en el European Tour. ¿Habrá preparado alguna sorpresa para la presentación este viernes de su hijo? Hoy ha salido del 10 y no ha tenido la oportunidad.

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A Thorbjorn Olesen todo le ha salido al revés en los últimos tiempos, sobre todo fuera del campo de golf, para que negarlo. No es sencillo recuperar el temple y el pulso después de estar un año fuera de juego por asuntos extradeportivos (finales de julio de 2019 a principios de agosto de 2020). Tampoco le iba bien en el arranque de 2021, pues se perdía la cita en Abu Dhabi tras pasar el Covid y luego se daba de baja en Dubai. El caso es que el danés, que tiene sólo 31 años, no lo olvidemos, está jugando esta semana en Gran Canaria su primer torneo del año 2021, que ya era hora. Y ha firmado un espléndido 65 para abrir boca. Siempre es una delicia verlo pegar esos hierros plenos de puntería, con un alucinante control de las distancias. Luce el sol en estas tierras, como casi siempre, y quizá sea aquí donde este gran jugador comience a ver la luz. No lo perdamos de vista de aquí al domingo.

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Cuando ya nos habíamos casi acostumbrado a escribir y hasta pronunciar el ‘Jazz Janewattananond’, ahora aparece otro tailandés de 22 años que responde al nombre de Suradit Yongcharoenchai… Hoy, además, terminaba con cinco birdies por los últimos seis hoyos, así que a lo mejor hay que seguir practicando.

Álvaro Quirós ha vuelto al redil y está trabajando de nuevo con su ‘padre deportivo’, Pepín Rivero, que además está aquí esta semana. Al margen de las lógicas cuitas técnicas, que las hay y llevan ya unas semanas trabajando en ellas, Rivero está convencido de que el de Guadiaro dará el gran salto de calidad cuando de verdad sea capaz de aceptar los errores en el campo con naturalidad y de manejar mejor las expectativas. Hoy, Quirós llegaba a situarse líder, con un parcial de seis menos en nueve hoyos, pero después venían los problemas y terminaba con una vuelta muy luchada de 67 golpes, tres menos. Sin embargo, después se les veía a los dos, Quirós y Rivero, muy satisfechos… Y seguramente era porque el jugador había sido al fin capaz de poner por encima todo lo bueno que había habido en la vuelta, que era mucho, puesto que había bordado el golf por sus primeros nueve del día, los segundos de Meloneras.

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Una historieta entre tantas: el portugués Pedro Figuereido no pasa por su mejor momento de juego. Hoy arrancaba el torneo por el hoyo 10 de Meloneras y su primer golpe era un ‘shanketazo’ terrorífico que llevaba la bola directa a un parking que está señalado como fuera de límites… Sin embargo, la bola rebotaba con fuerza en un coche e iba a parar, mucha atención, al interior de una de las carpas médicas, que sí que estaba dentro de los límites del campo. Dropaje sin penalidad y a seguir jugando. Así es la vida. Así es el golf.

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