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El equipo internacional le devuelve en los foursomes el 5-0 de ayer a Estados Unidos

Remontada antológica para llevar la Presidents a la casilla de salida

Ten-Golf
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Celebración del último partido del día © Presidents Cup
Celebración del último partido del día © Presidents Cup

Después del 0-5 que Estados Unidos le endosó ayer al equipo internacional en la jornada de fourball con la que arrancaba la 15ª edición de la Presidents Cup todo parecía encaminado a un desenlace rápido en favor del equipo de Jim Furyk. Sin embargo, este viernes, con un ambiente excepcional en el Royal Montreal Golf de Canadá, el combinado capitaneado por Mike Weir ha protagonizado una remontada antológica para dar la campanada y poner el contador a cero. Una paliza memorable que sólo se había visto una vez en toda la historia de la competición.

En Sudáfrica, en 2003, el equipo internacional fue capaz de endosarle un 6-0 en los fourballs del sábado a Estados Unidos. Fue la única vez que los de las barras y estrellas, que han hecho pleno cuatro veces en alguna sesión (1994, 2000, 2007 y ayer), se quedaron con su contador a cero. Hasta hoy, un día inolvidable para un equipo que ha demostrado talento, capacidad de superación, convencimiento en su juego y una compenetración en los foursomes que ha noqueado a USA para poner el 5-5 antes de la doble sesión de mañana.

El primer partido del día, que enfrentó a Patrick Cantlay y Xander Schauffele con Hideki Matsuyama y Sungjae Im, no tuvo historia. Los asiáticos ganaron siete de los 11 primeros hoyos de su ronda, mostrando una compenetración asombrosa en esta modalidad de golpes alternos, y lograron igualar otros cinco. El resultado, un tremendo 7&6 para el equipo internacional que igualó la victoria más amplia en toda la historia de la Presidents (de David Frost ante Kenny Perry en los individuales de 1996 y de Adam Scott y K.J. Choi ante Tiger Woods y Steve Stricker en los foursomes del jueves de 2011).

El segundo duelo también fue un recital del equipo internacional para sumar su segundo punto en esta Presidents. Adam Scott y Taylor Pendrith superaron cómodamente por 5&4 a Sahith Theegala y Collin Morikawa. La pareja estadounidense sólo ganó un hoyo en toda su ronda, que echó el cierre en el 14 convirtiendo a Scott en el jugador que más puntos ha sumado para el equipo internacional en toda la historia del torneo (22, uno más que el sudafricano Ernie Els). Una paliza que empezó a calentar las gradas del campo soñando con una remontada histórica.

El tercer partido y el quinto fueron los más emocionantes del día y llegaron hasta el final. No así el cuarto, en el que llevados en volandas por la afición canadiense, Corey Conners y Mackenzie Hughes dieron un recital para imponerse por 6&5 a Wyndham Clark y Tony Finau y poner el tercer punto en el casillero de los de Mike Weir. Como ocurrió en el segundo partido, la pareja estadounidense sólo fue capaz de ganar un hoyo de los 13 que se jugaron, perdiendo siete y confirmando que las parejas de foursomes de Jim Furyk no estaban funcionando.

El octavo duelo de esta Presidents, tercero del día, sirvió para que Jason Day, de regreso al torneo siete años después de su última aparición, viviera su momento de gloria. Formando pareja con el sudafricano Christiaan Bezuidenhout, los internacionales no llegaron a estar nunca por debajo en el marcador. Pero la cómoda ventaja de tres arriba con que salieron del hoyo 12 se les complicó peligrosamente al final. Perdieron el 13 y perdieron el 17, en el que el australiano tuvo un ‘match ball’ con un putt de unos seis metros que falló. Pero la gloria le esperaba en la última bandera…

Jugando desde la calle, Max Homa, que jugaba con Brian Harman, no logró cerrar su bola y terminó en el rough. Bezuidenhout tampoco fue capaz de llevarla a green y acabó también en una zona de hierba alta, pisada por el público. Y ahí emergió la enorme figura de Day para ejecutar un chip sensacional y dejarse el par hecho. La única opción para los estadounidenses de salvar al menos medio punto era que Harman embocara desde fuera de green, difícil pero no imposible, y aunque pegó un gran golpe, pasó un palmo a la derecha del hoyo. Cuarto punto para los de Weir.

Ya sólo quedaba un partido en juego que empezó ganando la pareja estadounidense formada por el Número Uno del mundo, Scottie Scheffler, y Russell Henley, pero que los asiáticos Si Woo Kim y Byeong Hun An lograron igualar enseguida y dominar brevemente tras el hoyo 6. Los de Furyk empataron en el 7 y las tablas en el marcador se mantuvieron hasta el 13, que los internacionales ganaron con un gran birdie en un par tres. Kim, con putts espectaculares, fue frenando cualquier intento de remontada de los de USA. Y Henley tuvo la opción de poner el partido empatado antes de jugar el último hoyo, pero su putt para birdie en el 17 tocó el borde del hoyo y no quiso entrar.

Así llegaron al 18, en situación de ‘dormie’ para los internacionales. Los dos equipos cazaron la calle desde el tee, pero los de Weir se quedaron cortos y con su bola fuera de green con el segundo golpe mientras que Scheffler logró llevarla a su objetivo. El approach de recuperación de An no fue bueno, abriéndole de par en par la puerta a Estados Unidos para salvar al menos medio punto. Henley tiró un buen putt, a asegurar, dejándose el par hecho. Y cuando nadie lo esperaba, de nuevo Si Woo Kim, con un putt de más de cinco metros, logró embocar para desatar la euforia en un Royal Montreal Golf rendido a su equipo y llevar la Presidents a la casilla de salida.

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