Inicio Blogs Firma Invitada G-Mac, el hombre que muta cuando llega al tee del 1

G-Mac, el hombre que muta cuando llega al tee del 1

Compartir

Por Pedro Fernández

Me sorprendió mucho Graeme McDowell…

Seguro que a todos se os viene a la cabeza la imagen de un tipo aguerrido, con carácter, carisma por arrobas, simpático, hablador.

Es difícil pensar en otra cosa cuando uno recuerda cómo ganó la Ryder Cup de 2010, el US Open de Pebble Beach o el torneo de Tiger. Vamos, y no hay que irse tan lejos, su victoria el domingo otra vez en el territorio de Woods fue increíble. Jugó de miedo, y eso que estaba pasando un bache.

No obstante, mi percepción de G-Mac fuera del campo es casi la contraria después la semana que estuve con él en la Ryder de Medinah. Es súper humilde, discreto, callado… Creo que hablé con él poco más de un cuarto de hora en los siete días. Prácticamente, no te enteras de que está en el vestuario.

Es un tipo serio, siempre con el rictus concentrado cuando está entrenando o cuando está jugando. Transmite la impresión de ser muy tímido. Es muy normal vistiendo. De hecho, si te lo encuentras un sábado por la Gran Vía ni te das cuenta que te has cruzado con McDowell, y si te dicen que es él, no te lo crees. No tiene el aura que deprenden los McIlroy, Poulter o Sergio.

Lo más sorprendente de todo es que después es un matador en el campo. Es valiente y casi diría que con un punto descarado. Así que mi conclusión es que G-Mac es un tipo que se transforma cuando pisa el tee del 1. Se produce una mutación que algún día los científicos deberían investigar.

Por cierto, en ese cuarto de hora que estuve hablando con él me contó que ha abierto un restaurante en Florida que se llama Nona Blue. No estaría mal hacerle una visita algún día. Ya está. Apuntado en la lista de tareas pendientes.

SÍGUEME TAMBIÉN TWITTER 

Serial: 16 hombres y una GESTA

Rory McIlroy: ‘Rors, un niño en los mundos de Yupi’

Sergio García, un gran desconocido
Ian Poulter, el ‘Killer’
Peter Hanson, ‘Tan buen golfista como bicho raro’
Nico, ‘el seductor’