Rory McIlroy dejó entrever en Dubai hace poco más de un mes que en 2019 se iba a centrar en el PGA Tour y que prácticamente daba por hecho que no jugaría el número mínimo de torneos exigido por el Circuito Europeo para mantenerse como miembro. Al no ser año Ryder, el norirlandés quería aprovechar para aligerar su calendario y, sobre todo, poner aún más énfasis en los grandes.
El European Tour puede perder a McIlroy el próximo año
Este anuncio de Rory cayó como un jarro de agua fría entre los rectores del European Tour. La maquinaria diplomática se puso en marcha y Keith Pelley, jefe máximo, mantuvo una conversación larga con el golfista norirlandés. Parece que la reunión ha surtido el efecto deseado y Rory ha decidido dar marcha atrás.
Según publica el diario irlandés, Irish Mirror, McIlroy va a jugar el mínimo de torneos que exige el European Tour. El cambio en su calendario es el siguiente. El mínimo exigido en Europa es cuatro torneos además de los Majors y los WGC. Pues bien, hace un mes, McIlroy sólo tenía previsto jugar el Open de Escocia y el Omega European Masters de Suiza. Sin embargo, según desvela el diario irlandés, ha virado y añadirá en su calendario el Omega Dubai Desert Classic y el Open de Irlanda o el BMW PGA Championship de Wentworth.
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Este replanteamiento de McIlroy merced a la gestión diplomática del European Tour, ha sentado de maravilla en el European Tour. Desde luego, es un balón de oxígeno y un refuerzo frente al PGA Tour, aunque de esos torneos sólo Escocia y Wentworth sería Rolex Series. Menos da una piedra, pensará Pelley.
