Sergio García (-5) ha reaccionado. El español ha entregado un 68 en la segunda ronda de la Final de Dubai, un resultado notable, aunque todavía habrá que esperar al cierre de la jornada para situar su remontada en la dimensión adecuada, puesto que se están haciendo muchos birdies en el Earth course del Jumeirah Golf Estates y son muchos los gallitos que vienen también apretando, comenzando por Tommy Fleetwood, que parece dispuesto a darle emoción hasta el último suspiro a la Race to Dubai.
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En cualquier caso, para Sergio era de vital importancia cambiar la marcha y asomarse un poquito por arriba, para darse todavía opciones de cobrar protagonismo durante el fin de semana. A su paso por el meridiano de la vuelta, de hecho, el español había puesto los mimbres a uno de esos días especiales, con un parcial inmaculado de cuatro menos en los primeros nueve, jugando muy bien y, sobre todo, leyendo mejor los putts.
Por los segundos nueve, sin embargo, perdía la potente inercia que traía y quizá por ello él sienta que la remontada y su vuelta se han quedado cortas. Veremos a ver hasta qué punto es así, pero hay que insistir en que para él hoy era imprescindible ponerse en marcha y ese objetivo lo ha cumplido.
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En el hoyo 13, par 3, pegaba un gran tiro y su putt de birdie dejaba la bola asomada al hoyo, y acto seguido no podía sacar el birdie en el 14, par 5, con lo que su marcha quedaba frenada. Sergio ha cambiado el ritmo, pero después de su largo y potente arranque le ha faltado ese remate al alza que sí encontraban, por ejemplo, los suecos Alexander Bjork (-7) y Henrik Stenson (-7). Ellos sí que están metidos en la pomada de pies a cabeza, hagan los que hagan quienes vienen apretando por detrás.
La mejor vuelta del castellonense en este campo es un 64, registro que obtuvo por partida doble en el año 2012, aunque hace doce meses cerraba este mismo torneo con una sobresaliente tarjeta de 65 golpes. Teniendo en cuenta que mañana tampoco se espera demasiado viento (el domingo sí puede soplar un poco más, según las previsiones), la solidez mostrada por García durante las últimas semanas legitima el deseo de verlo en esos números, para colocarse en los puestos calientes de la parrilla en la última jornada.
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Jorge Campillo (+4), por su parte, sigue encontrándose horrorosamente incómodo en los greenes. El extremeño sólo ha podido hacer dos birdies en 36 hoyos y el jueves fue de largo el peor pateador del torneo. Hoy no le han ido mucho mejor las cosas y sus dos tarjetas de 74 golpes lo alejan de cualquier aspiración ambiciosa, aunque él debe seguir apretando durante el fin de semana porque cualquier punto, cualquier euro, puede ser importante. Y además, necesita recuperar las mejores sensaciones de cara a la Copa del Mundo de la próxima semana.
