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«Mi único objetivo fue no echarlo todo por la borda»

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Tiger Woods. © Golffile | Dalton Hamm
Tiger Woods. © Golffile | Dalton Hamm

Tiger Woods no tuvo un buen día ayer, pero supo encontrar la paciencia, el juego corto y el putt suficiente para seguir en la pelea a falta de 36 hoyos. Sus sensaciones no son buenas, pero sabe que todo puede cambiar en las dos próximas rondas. Es lo que va a intentar. Cree que se verán buenas vueltas el hoy y mañana y confía en meter él una de ellas. Ayer rompió una racha de nueve rondas seguidas bajo par en Bay Hill.

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Balance de una difícil… «Fue un día complicado. Ni le pegué bien a la bola ni la dejé cerca, así que fue un día de aguantar como fuera. Tuve un par de wedges en la mano desde la calle y no conseguí dejarla a menos de seis metros. Sólo funcionó muy bien mi putt. Mi único objetivo fue no quedarme completamente fuera de la pelea. Cualquier resultado bajo habría estado bien, y al final me quedé muy cerca. Simplemente ha sido un mal día. No me encontré cómodo y se contagió a todo el grupo. Ninguno conseguimos pegar realmente buenos golpes».

«Ni le pegué bien a la bola ni la dejé cerca, así que fue un día de aguantar como fuera»

La clave estuvo en el putter… «El putt está funcionando muy bien en todo el año. Sólo estuvo más flojo en los segundo nueve de Rivera, con tres tripateos, el resto estoy muy contento. Pero no sólo es una cuestión de meter putts, también cuenta pegar buenos hierros, ya que es importante dejarte la opción de meter putts. Es posible que la gente no se dé cuenta de lo importante que son los tiros a green para meter putts. No sólo se trata de la distancia, sino también de estar en la zona buena del green».

Un Bay Hill propicio para hacer vueltas bajas… «El campo se ha secado y las condiciones eran un poco más difíciles, así que hacía falta estar más fino y no ha sido el caso. El fin de semana va a estar como a Arnold Palmer le gustaba el campo, duro y muy rápido. Va a hacer más calor y no se prevee agua, así que el campo va a estar más corto. Estoy un poco lejos del liderato y con muchos jugadores en medio, tendrá que jugar muy bien para dejarme una opción».

«Va a hacer más calor y no se prevee agua, así que el campo va a estar más corto»

Algo rígido, pero sin dolor en la espalda… «Físicamente estoy bien, no tengo dolor en la espalda. Sólo siento que estoy un poco más rígido, pero es normal. Tenía previsto jugar tres de cinco semanas, si decidí jugar el Valspar fue porque fallé el corte en Riviera y quería más vueltas de competición antes del Masters».

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La sacada de búnker en le hoyo 15… «El par en el hoyo 15 estuvo muy bien. Lo peor del golpe del búnker es que la bola estaba enterrada y el borde del búnker muy cerca. Tenía miedo de que la varilla pegara con el talud antes de darle a la bola y que se hundiera la cabeza del palo en la arena. Por eso hizo un swing mucho más amplio de lo que tocaba en ese golpe».

La mentalidad… «He conseguido victorias bajo presión de muchas maneras diferentes y eso quizá me da un poco más de experiencia que el resto de jugadores. Me siento cómodo en esas situaciones. Estoy acostumbrado».

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La diferencia con el Valspar… «La semana pasada jugué muy bien y pegué golpes muy buenos, pero no conocía el campo lo suficiente como para dejarme más opciones de birdie. Hice pocos bogeys, pero también logré pocos birdies. Bay Hill lo conozco mucho mejor, pero no estoy jugando tan bien como la semana pasada. A ver si consigo ajustar el juego el fin de semana y me puedo acercar a la cabeza».

«El lunes, cuando recogí a los niños del colegio, me estuvieron contando que vieron mucho de la jornada del domingo y me hizo mucha ilusión»

La motivación añadida de sus hijos… «Es muy bonito tener la oportunidad de ganar de nuevo ahora que mis hijos son mayores y lo pueden ver. El lunes, cuando los recogí el colegio, me estuvieron contando que vieron mucho de la jornada del domingo y me hizo mucha ilusión. La última vez que gané fue en 2013 y ellos eran muy pequeños, no lo pudimos celebrar juntos, pero ahora, sin duda, es una motivación más».