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Rose y Tiger acusan la vueltecita de tuerca de Pebble Beach (y Koepka, a lo suyo)

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Tiger Woods. (Copyright USGA/Chris Keane)
Tiger Woods. (Copyright USGA/Chris Keane)

El jueves, 23 jugadores firmaron tarjetas por debajo del par en el turno de mañana. Este viernes han sido algunos menos (17). No es que la USGA haya apretado las clavijas a conciencia (de hecho, las condiciones parecen muy similares un día y otro), pero hay quienes han sentido los greenes un poco más duros y además las primeras horas de la mañana han sido un poco más frías. Pequeños detallitos que van armando un US Open.

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El caso es que el líder provisional sigue siendo el mismo que ayer, Justin Rose (-7), pero el inglés ha acusado ligeramente esta vueltecita de tuerca, más o menos intencionada o planeada, y ha firmado un 70, resultado que por otro lado es consistente, serio y mucho más que válido. También la ha acusado su ilustre compañero de partido, Tiger Woods (PAR), que finalizaba la ronda con dos bogeys, cuando ya soplaba algo más el viento, y se queda un poco descolgado con una tarjeta sobre par de 72 golpes. La diferencia fundamental ha sido el putt: ayer, 25, y hoy 32. De Rose puede señalarse algo parecido (los greenes andan algo más rebeldes, por lo que se ve): ayer sumaba sólo 22 putts y hoy 27.

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Todavía no sería razonable descartar a Tiger para la lucha por el triunfo, pero está en el límite. No está tan lejos de la cabeza, siete golpes, pero sin duda alguna acabará el día con una nutrida y potente nómina de jugadores por delante. Ardua tarea la suya, pero como se trata de Woods, dejaremos la ventana entreabierta.

Brooks Koepka (-4), mientras tanto, sigue a lo suyo. Esta semana ha adoptado el perfil de hormiga. Acumulando grano a grano. Todavía no se ha visto su versión de juego más poderosa y sin embargo está perfectamente colocado para el fin de semana después de firmar otro 69, igual que el jueves. El objetivo de igualar a Willie Anderson como triple ganador consecutivo de este torneo sigue vivo. Vivo y coleando, vaya.

El mayor movimiento de la mañana, no obstante, lo ha producido un veterano como Jim Furyk (-2), que cerraba una espléndida vuelta de 67 golpes, cuatro menos en el día. Una prueba más de que en Pebble Beach la maña todavía tiene mucho que decir ante la fuerza.

A Rafa le espera otra larga tarde de cuchillos largos…

Con el corte tratando de llegar hasta el +2 (da toda la sensación de que ahí se va a quedar, para regocijo de Rafa Cabrera Bello), ya se pueden confirmar algunas ausencias mayúsculas para el fin de semana: Tony Finau (+4), Ian Poulter (+4), Alex Noren (+5), Keegan Bradley (+7) o Thomas Pieters (+10).

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