Calle del hoyo 9. Andamos por fuera de las cuerdas y nos cruzamos con David Leadbetter, uno de los grandes gurús del golf mundial, una referencia en todo lo que tiene que ver con instrucción. Está siguiendo a Rafa Cabrera Bello. Es la ronda de prácticas del miércoles, a unas horas de empezar el US Open.
EN DIRECTO: Última ronda del US Open de Pebble Beach
Leadbetter mira con lupa a su pupilo canario para tratar de afinar las constantes vitales de su swing antes de afrontar un test tan exigente como el de Pebble Beach. Sin embargo, entretanto, tiene tiempo para dirigirse a nosotros y preguntar por Adri Arnaus. Está muy interesado. Quiere conocer nuestra opinión, pero sobre todo quiere dar la suya. “Es un jugador grande”. Es su titular. Su resumen. No es poca cosa viniendo de alguien con su hoja de servicio.
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Caminamos este sábado por la cancha de prácticas de Pebble Beach. Arriba y abajo, como cada día, ya que hay que cruzarla para ir desde el centro de prensa al tee del 1 y al 18. En uno de esos paseos nos llama la atención Glen Murray, eterno caddie de Sergio García y actual de Henrik Stenson. Experiencia por arrobas. Ha visto golf para aburrir y siempre ha estado con los mejores jugadores del mundo. Hablamos de todo un poco, del US Open, de Pebble Beach y, al cabo de un tiempo, nos pregunta por Adri Arnaus. No tiene dudas. Lo define como un “jugador especial”.
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Arnaus ha jugado jueves y viernes con Tom Hoge y Clement Sordet. Hacemos los tres últimos hoyos del viernes junto a Thomas Levet, que forma parte esta semana de la expedición de Canal Plus Francia para la cobertura del US Open. Levet no necesita presentación: doce victorias profesionales, seis de ellas en el European Tour, una Ryder Cup ganada y 22 Majors jugados. Entre anécdota y anécdota surge el nombre de Arnaus. “Es un pegador extraordinario, tiene una pinta excelente, va a llegar muy lejos si trabaja bien”, asegura el galo.
Arnaus ya tenía claro lo más importante antes de pasar el corte
Todos los saben. Todos tienen claro que Adri Arnaus ha llegado a la élite para quedarse. Nadie duda de que es un jugador llamado a codearse cada semana con los mejores. “Este es sólo el primer Major de muchos que van a venir… Ha sido una gran experiencia. Hay que jugar estos campos, estos greenes, estas preparaciones y aprender. Le va a venir fenomenal”. Esta frase es de Nacho Garrido, su entrenador y sombra durante toda la semana.
Nunca en la historia del US Open pasaron tantos españoles el corte
Arnaus está en boca de todos. Cualquiera que se cruza con él le toma la matrícula. El mundillo del golf detecta en el golfista de El Prat algo especial. Es la pegada que tiene, es su actitud, es su presencia, su juego… Son muchas cosas que, por supuesto, tiene que ir puliendo, pero que le ponen en la parrilla de salida para conseguir grandes cosas.
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No obstante, lo más importante es que el propio Adri lo tiene claro. “Esto no ha hecho más que empezar. Este US Open lo guardaré para siempre en mi memoria porque ha sido el primero y es muy especial. Ya he pasado por la tienda para comprar todo tipo de recuerdos. En todo caso, sé que es el primero de muchos. Esta semana he aprendido que no estoy tan lejos para estar arriba en este tipo de torneos y en cuanto a lo que debo mejorar he visto que estos jugadores son muy sólidos alrededor de green y también con el putt. Eso es lo que me llevo y que ya tenía claro”, afirma.
Arnaus ha terminado el US Open con una ronda de 72 golpes para un total de +6, por debajo del puesto 60º. Se marcha de Pebble Beach con una sensación agridulce. Está satisfecho por haber pasado el corte en su primer Grande, pero se marcha con la espinita de no haber podido saborear la experiencia de verse arriba luchando por la victoria. Nadie duda de que ese día acabará llegando…
