
Qué maravilloso y qué puñetero puede ser este bendito deporte nuestro del golf. Si el jueves me ponen un papel sobre la mesa diciendo que voy a quedar quinto en el Jonsson Workwear Open, lo habría firmado con los ojos cerrados. Sin embargo, el domingo, tras tener ese putt de tres metros en el 18 para acabar segundo, la sensación es de rabia. Es que no nos da tregua. Siempre martilleando la cabeza.
Por cierto, un apunte sobre ese putt de birdie en el 18, al volver de la suspensión por tormenta. La televisión engaña, pero os aseguro que no se veía nada. Lo tiré a oscuras. Yo creo que fue una burla del karma. Aunque en Kenia y el primero de Sudáfrica ya había pateado mejor que semanas atrás, no terminaba de sentirme cómodo en los greenes. Por este motivo, la semana pasada decidí trabajar en el putting green con los ojos cerrados, para sentir aún mejor el ritmo. Pues el domingo tuve la misma sensación, de estar pateando casi con los ojos cerrados… Me dio mucha rabia porque lo habían visto bien (con Gonzalo Vicente, mi caddie), pero le pegué un poco con la punta del palo y se marchó. Te vas con sensación de pena, pero con la satisfacción de haber jugado muy bien al golf.
En cualquier caso, ha sido una gran semana, muy positiva, con muchos puntos de Race to Dubai que ya hacían falta. El torneo se me escapó entre los hoyos 11 y 14 del domingo. Fueron cuatro putts seguidos de entre tres y cinco metros que no entraron. Los fallé tirándolos muy bien. Después, es verdad que la reacción fue muy buena. En el 15 pegué el mejor golpe del día. No creo que nadie la dejara más cerca. Más tarde fue el eagle en el 17. Semana positiva que nos hacía falta. En Kenia jugué muy bien y fallé corte, la semana pasada, también y quedé el 30… Era cuestión de que todo cuadrara. He trabajado bien en pretemporada y están saliendo las cosas, pero hay que seguir.
Os cuento una curiosidad del domingo. Por la mañana, en la casa, antes de salir a jugar, me he puesto en las notas del móvil el resultado que tenía que hacer para ganar. Si lo hubiera hecho, habría ganado. Pero bueno, insisto, semana muy positiva. Le he pegado muy bien. El fin de semana no fue tan sólido, pero bastante bien y el putt ha vuelto a funcionar. He vuelto a coger buen toque.
Por último, sois muchos los que comentáis sobre mi driver después de verme en televisión. Es exactamente lo que estáis viendo. No me dejo nada en cada drive. Voy con todo. Al límite. Os cuento de dónde viene…
Es algo que empezamos a trabajar antes de acabar la temporada pasada. Teníamos que sacar algo más del drive. Empecé a hacerlo con Jordi García del Moral en el campo de prácticas y la cosa funcionaba. Lo probé por primera vez en competición en Sotogrande, en alguna calle más ancha, y fue bien. Desde entonces, pego todos los drives a full. Nunca he sido un gran empalador de drive así que perdía muchos metros respecto al resto. Así, yendo con todo, empalo mucho más, soy capaz de poner el palo más lejos del cuerpo, con algo de overswing y genero más velocidad de palo. Estoy driveando mejor, empaló más, hago más metros y le saco más rendimiento. No hay mucho más que hablar.
Qué grande este Ángel!
Cómo nos guata que cuenten curiosidades técnicas que se les ocurren hasta en las rondas oficiales(cerrar los ojos,…)