Alejandro Del Rey ha sido el mejor español en esta primera jornada de la 90ª edición del British Boys. Los 36 hoyos de ayer no le han pasado factura. Más bien podríamos decir que ha sido fundamental para conocer los entresijos de Renaissance.
También os diré que hemos jugado dos campos irreconocibles. Algo de lluvia y ligera brisa mañanera. Un caramelito después de lo que habíamos vivido en las rondas de prácticas.
La vuelta
Si echas un vistazo a la tarjeta de Alex pensarás que ha sido una vuelta sencilla. Nada más lejos de realidad. ¡Qué manera de luchar y recuperar! Algún ejemplo…
En el par 3 del 15 (180m) ha sacado un par mágico. Salida con el hierro 5 bloqueado a la derecha y desde ahí un extraordinario approach que deja la bola a menos de un metro. «Spanish hands«, me dice James Cooper –un inglés que va siguiendo el partido–. Tres bajo par y tres hoyos por delante.
Gran susto al 16. La salida del par 5 se va a la izquierda, al rough más espeso. Llegamos allí y no encontramos nada. Han pasado 4 minutos y el árbitro nos avisa de que solo nos queda uno. A falta de 30 segundos el mismo Cooper encuentra la bola. Imaginad qué alivio. Un hoyo que pintaba a bogey, en cuestión de minutos se convierte en birdie.
En el 17 está punto de conseguir el birdie y ponerse -5. Certifica el par y salgo corriendo a la caída de driver del 18. Un hoyo realmente difícil con el viento en contra. La carrera resulta fructífera. El driver se va desviado a la derecha, justo a dos metros de donde estaba situado. Otra vez al rough más espeso. No hay opción de ir a green. Aproach, dos putts y vueltón en el bolsillo. 68 golpes (-3) y un gran colchoncito para mañana.
En este momento tenemos a siete españoles dentro de los 64 que jugarán las rondas de match play. Mucha tela que cortar, pero esperanzadora primera jornada. Reseñables han sido las vueltas de Eugenio López-Chacarra (-1) y Miguel Ángel Herrero (Par).
«Sueño americano»
Un torneo que acoge a los mejores sub-18 del mundo no puede pasar inadvertido. Prueba de ello es la gran cantidad de coaches estadounidenses que vemos esta semana. Sin hablar con los jugadores –lo tienen prohibido– observan con detalle a las promesas del golf mundial. He de deciros que han sido varios los que han preguntado por los nuestros.
Quienes ya tienen decidido su futuro son Alejandro Del Rey e Íñigo Beñarán. Ambos ponen rumbo a EEUU al finalizar este torneo. El madrileño estudiará en una universidad muy conocida por el golf español: Arizona State. Aquí lo hicieron en su día Alejandro Cañizares, Azahara Muñoz, Noemí Jiménez, Carlota Ciganda o el hombre de moda, Jon Rahm. Beñarán lo hará en otra gran universidad: Texas State.
Mañana volvemos. Espero que con buenas noticias.
