La temporada ha sido muy buena. Dos victorias, Final de Dubai, tres Grandes, el corte pasado en el PGA Championship… la verdad, creo que objetivamente es para estar contento, pero ya sabéis a la velocidad que va el golf mundial y lo enormemente preparados que van llegando los jóvenes al Tour. No puede uno dormirse en los laureles y hay que seguir progresando para no quedarnos atrás.
Me dio rabia quedarme fuera del Open Championship por tan poco. Como sabéis, se clasificaban de manera directa para Royal Troon 2024 los 30 mejores de la Race to Dubai a final de curso y yo terminé en el puesto 31º. Al final, son pequeños detalles, un golpe aquí o allá, un mal fin de semana. Es una de las cosas que tengo grabadas a fuego, hay que pelearlas todas. No sé si será la edad, los años que llevo en el Tour, la influencia de Adriana, que voy a ser padre, o quizá un poco de todo, pero tengo claro que cada semana, cada día de golf, cada golpe, cuenta.
No os voy a negar que me ha costado mucho tomar la decisión de no estar esta semana en Leopard Creek para jugar el Alfred Dunhill Championship. Más allá de que lo haya ganado en el pasado, es uno de mis torneos favoritos, me encanta jugar en Sudáfrica y aquello es algo muy próximo al paraíso. Sin embargo, tanto mi equipo como yo teníamos claro que necesitaba un descanso y, sobre todo, hacer una muy buena pretemporada para llegar a enero lo mejor posible.
En este sentido, ahora mismo toca estar en el gimnasio. Hay una promesa que le hice a Raúl, mi caddie, y la quiero cumplir. Me comprometí con él a llegar al mes de enero con tres millas más de velocidad de bola con el driver. He acabado el año con 169 y la idea es ponerme en 172. No queda otra si se quiere competir ahora mismo en el DP World Tour. Hay que ganar distancia. En ello estamos.
En este sentido, el gran objetivo para los primeros meses es intentar mantenerme entre los 100 primeros del mundo para asegurar el PGA Championship y, a partir de aquí, todo lo que venga, bienvenido sea, sin renunciar a nada, como siempre. Tal y como está configurado el calendario, cada vez son más importantes los cuatro primeros meses del año.
Y ahora, a darle caña al físico para cumplir la promesa en enero.
