Inicio Grandes Circuitos Algunos datos para desmontar uno de los grandes tópicos del golf mundial

Algunos datos para desmontar uno de los grandes tópicos del golf mundial

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Rory McIlroy posa con el trofeo de ganador de Irish Open 2016. © Golffile | Thos Caffrey
Rory McIlroy posa con el trofeo de ganador de Irish Open 2016. © Golffile | Thos Caffrey

La reciente victoria de Jon Rahm en el Sentry ha multiplicado las expectativas y ha disparado los análisis de registros brutos, así como los porcentuales y estadísticas, algo que suele ser habitual, sobre todo cuando gana un gran campeón que ya viene escribiendo su propia y laureada historia, como es el caso del jugador español.

Es en este punto cuando nos topamos con un viejo ‘mantra’ o tópico, que suele darse por hecho al otro lado del Atlántico, y que esta semana también ha vuelto a salir a la palestra: el porcentaje de victorias totales de los grandes jugadores europeos que tienen tarjeta del PGA Tour, sube como la espuma por el simple hecho de jugar cada año algunos torneos del calendario regular del circuito europeo, donde es más sencillo ganar. Este sería el caso de Jon, así como de otros jugadores como Rory McIlroy, Matt Fitzpatrick o, en su día, Sergio García, entre otros muchos europeos que compaginaron o compaginan ambos circuitos.

En el caso de Jon, tal regla de tres suele aparecer automáticamente en los comentarios de especialistas estadounidenses, puesto que sus números en el calendario regular del DP World Tour (no cuentan, por tanto, majors y campeonatos del mundo) son especialmente deslumbrantes: Jon ha disputado sólo 22 torneos de dicho calendario regular y atesora la friolera de ocho victorias, una más de las que suma en el PGA Tour en 92 torneos de su calendario regular (insistimos: no cuentan majors y WGC).

¿Sería, en efecto, tan sencillo para los crack americanos hartarse de ganar en el circuito europeo? ¿O no será más bien que el caso de Jon Rahm es único, intransferible y absolutamente atípico?

Veamos algunos casos reveladores, que seguramente no demuestran empíricamente la tesis contraria (que sería la de concluir que es muy complicado para los crack americanos ganar en el DP World Tour), pero que sin duda ponen en entredicho esa ‘sensación’ que existe al otro lado del Atlántico acerca de lo sencillo que es sumar victorias en el circuito de la Vieja Europa, el más global de cuantos existen, atendiendo a los continentes y países que visita cada año.

Vayamos con el caso de Patrick Reed, por tratarse de un gran campeón estadounidense que ha disputado bastantes torneos del calendario regular del DP World Tour en los últimos años. Pues bien, Reed todavía no ha cantado victoria en 27 intentos (en 203 torneos del calendario regular del PGA Tour si suma seis triunfos). Pues no, parece que eso de desembarcar en Europa no garantiza automáticamente la miel del triunfo…

El caso de Rory McIlroy es también muy significativo. Y hasta cierto punto, muy sorprendente. Por un lado, el norirlandés suma sólo siete triunfos en los 132 torneos que ha disputado del calendario regular del circuito europeo, uno menos que Jon en sólo 22 comparecencias. Por otro lado, Rory se va a las 16 victorias en los 123 torneos que ha jugado ya del calendario regular del PGA Tour. La diferencia es bestial, aunque siempre podría argumentarse que McIlroy acumuló muchos torneos del DP World Tour siendo todavía muy joven, antes de confirmarse como estrella rutilante y ganadora… Por el contrario, también podría contra argumentarse que nunca ha dejado de jugar algunos torneos en el DP World Tour y su última victoria en el calendario regular de este circuito data del año 2016 (Irish Open). Pues no, no es tan sencillo como a veces se pinta eso de venir al DP World Tour y levantar trofeos…

Otro gran nombre: Dustin Johnson. El de Carolina ha disputado en su carrera quince torneos del calendario regular del circuito europeo y suma dos victorias, las dos que conseguía en Arabia Saudí. Este extraordinario jugador, por otro lado, sumaba hasta 16 triunfos en los 210 torneos que ha disputado del calendario regular del PGA Tour.  Es cierto que porcentualmente ha ganado más en el circuito europeo, pero proporcionalmente los registros son similares.

Y cerremos con Tiger Woods, por irnos a la máxima estrella y al gran hacedor de triunfos de la historia del golf mundial. Tiger ha jugado hasta la fecha en su carrera 25 torneos del calendario regular del circuito europeo y suma ocho victorias… Las mismas que Jon. El de Cypress, por su parte, atesora 49 victorias en 234 torneos del calendario regular del PGA Tour (una vez más: obviando majors y WGC). Como ocurre con D. J., el índice de victorias anda muy igualado en uno y otro calendario regular, teniendo en cuenta que ha jugado mucho más en el PGA Tour, obviamente, y por tanto es más difícil mantener los altos porcentajes. Además, si queremos barrer descaradamente para casa, se podría señalar de manera legítima y verdadera otro revelador dato: Tiger falló tres cortes en sus 25 torneos en el DP World Tour (11,53 por ciento), por los 16 que fallaba en los 234 del PGA Tour (sólo un 6,8 por ciento).