Italia está de moda. Matteo Manassero ganó la semana pasada en en el Challenge Tour en Copenhague diez años después de su último título en el DP World Tour. La alegría de los azzurri se prolongó siete días después con la victoria de Andrea Pavan (-18) en el D+D Czech Challenge, cuando está cerca de cumplirse una década desde que el romano alzó su último trofeo en la segunda categoría del Circuito Europeo. El influjo de la Ryder Cup, aunque no afecte a estos jugadores, está ayudando al despegue de los golfistas transalpinos en el Challenge Tour, no así en el DP World Tour. Que se lo pregunten a Guido Migliozzi…
Pavan era un jugador consolidado en Europa y, de hecho, atesora dos triunfos, uno de ellos precisamente en el D+D Real Czech Masters en 2018 y el otro en el BMW International Open de 2019, cuando derrotó en un desempate a Matt Fitzpatrick, pero en este deporte un día estás arriba y el otro abajo. Y el italiano bajó de división. Ahora, con 34 años, aspira volver a la élite del Viejo Continente, un reto que tiene más cerca, igual que Manassero, después de coronarse en el Panorama Golf Resort de Kácov, en plena Bohemia Central.
The winning moment with your fellow Italians first to celebrate with you 🇮🇹#CzechChallenge | @AndreaPavan89 pic.twitter.com/9p1q58pxBO
— Challenge Tour (@Challenge_Tour) June 4, 2023
El romano necesitó jugar de nuevo por debajo del par porque los de atrás dieron un fuerte arreón. El sudafricano Casey Jarvis (-17), líder del torneo en el comienzo, empujó todo lo que pudo, el sueco Adam Blomme (-16) también se esforzó por cazar la primera plaza y el inglés Marco Penge (-13) hubo momentos en los que estuvo en la ecuación para ganar después de embocar seis birdies y un eagle casi seguidos.
Pero Pavan se recuperó de un desconcertante inicio, con dos bogeys y un doble bogey en cinco hoyos para enganchar seis birdies entre el 6 y el 13 para vivir de las exiguas rentas hasta el final y de nada le sirvió a Jarvis el birdie del 18 tras pifiarla en el par 5 del 17. Al romano le valía el par en la última bandera y eso firmó para sumar su primera victoria de la temporada y subir al top ten de la Road to Mallorca.
Javier Sainz (-8) acabó decimocuarto como mejor representante de la Armada en Chequia. El vizcaíno resbaló en el 1, pero ya sólo embocó pares o birdies (4) para un buen -3 en la ronda definitiva. David Borda (-7), en cambio, no disfrutó de un feliz domingo al concluir con una tarjeta de dos sobre par cuando estaba peleando incluso por la victoria. Eso sí, esta decimonovena posición y su buen rendimiento en Chequia debe valerle alguna invitación más en el Challenge Tour este curso. Pep Anglés ( -5) y Borja Virto (-5) terminaron en el top 30, mientras Scott Fernández (+8) quedó muy rezagado.
