Inicio Grandes Circuitos Challenge Tour Un recuerdo muy feliz a la sombra de la Torre de Bayterek

Un recuerdo muy feliz a la sombra de la Torre de Bayterek

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Hacemos un primer acercamiento al major del Challenge con el mejor cicerone posible

Álvaro Velasco ha jugado una vez en el Zhailjau Golf Resort y ha ganado. Fue hace cuatro años. Se convertía en el primer español que conquistaba un torneo profesional en Kazajistán. Suena bien, aunque aquí lo éxotico es casi lo de menos. Hoy volvía a pisar aquellas verdes praderas de Almaty y los recuerdos se disparaban.

No es para menos. Aquel triunfo en 2010 le dio un empujón definitivo para coronarse campeón del Challenge Tour y acceder por la puerta grande al Circuito Europeo. No hay mejor estímulo posible para repetir gesta esta semana y recuperar el sitio que le pertenece en la primera división del golf europeo.

Velasco es un jugador sereno, pero hoy no podía evitar lanzar alguna que otra sonrisa durante la vuelta de prácticas. “Tengo muchos y grandes recuerdos. Empezando por el día de entrenamiento hasta la cena del domingo celebrando con toda la «armada española», pasando lógicamente por un montón de golpes, hoyos y sensaciones difíciles de olvidar. Hoy por el campo no paraba de recordar esos momentos, especialmente el último día. Recuerdo que esa semana estuve especialmente inspirado en los putts de menos de cinco metros”, explica a Ten-Golf.

Qué mejor que preguntar a Velasco sobre los secretos de Zhailjau. El barcelonés lo tiene muy claro: “diría que la clave para hacer pocas en este campo es aprovechar los cinco pares 5 y el hoyo 8 (par 4 que se llega a green), para hacer unos cuantos birdies. Lógicamente, pegar buenos drivers desde el tee ayudará mucho en estos hoyos. Creo que los putts cortos también son importantes aquí, en unos greenes que son bastante movidos”, apunta.

No es ninguna exageración hablar de major del Challenge cuando nos referimos al Kazakhstan Open. Hasta los propios jugadores lo consideran así. Es algo que se ve y se siente esta semana. “Se nota principalmente por la calidad de los jugadores. Muy pocos de los mejores de la temporada suelen fallar a la cita.

Por otro lado, el campo siempre está preparado en unas excelentes condiciones”, afirma.

Álvaro llega preparado y dispuesto a pelear por ser el primer jugador en los diez años de historia del torneo que gana en dos ocasiones la Torre de Bayterek de Astana, el trofeo que se entrega al campeón. Mentalmente está fuerte. “Llego muy bien. No estoy jugando mi mejor golf y las sensaciones tampoco son las mejores, pero he estado trabajando muy bien y llego en un estado mental muy bueno.

En cuanto a expectativas, solo espero dar lo mejor de mí en cada golpe y disfrutar mucho mientras lo hago, en un lugar tan especial para mí”, señala. Que así sea, Álvaro.