– Andy Sullivan (-10) es el líder del Abu Dhabi HSBC Golf Championship tras una segunda jornada que empezó con casi tres horas de retraso por culpa de una intensa niebla y que no se ha podido completar. Tal y como estaba previsto, ningún partido de la tarde terminó y el más retrasado se encuentra en el hoyo 9. Es decir, el sábado se jugarán las algo más de dos horas que restan de segunda vuelta (el juego empezará a las 7.40, hora local) y acto seguido, tras el corte, se disputará la tercera, por dos tees y en grupos de tres.
– Sullivan ya demostró el jueves por la tarde que no se había dejado intimidar por la buena vuelta que habían firmado las estrellas por la mañana. Ni el siete bajo de Stenson, ni las seis menos de McIlroy, ni el menos cuatro de Jordan Spieth hicieron temblar a un golfista que, aunque la procesión siempre vaya por dentro, transmite en todo momento felicidad en el campo. El inglés bromea, sonríe, guiña un ojo… de todo. Es muy gestual. Seguramente es su manera de combatir la presión. Y le va de lujo. Dos vueltas de 67 golpes lo han colocado en la primera posición del torneo con un golpe de ventaja sobre Bryson DeChambeau, que se caía de la cabeza justo cuando se echaba el sol en Abu Dhabi con un bogey en su último hoyo, el 18, el noveno de su ronda.
– Sullivan comenzaba y terminaba su ronda con tres birdies consecutivos y eso que reconocía que su golf no ha estado del todo fluido. ¿Problemas con el swing? No van por ahí los tiros… «No, no, el swing está bien, no se trata de algo grave. De hecho, hoy he hecho muchos swings buenos. Ha sido un problema a la hora de apuntar y alinearme. Lo importante es que el juego corto ha salido al rescate. Ha funcionado muy bien y ojalá pueda seguir así». Sullivan ha jugado las dos primeras rondas con el próximo capitán de la Ryder, Darren Clarke, lo que sin duda es una motivación extra: «jugar con Darren claro que suma. Creo que él sabe de lo que soy capaz, pero siempre es bueno hacerlo bien delante suya. Ojalá pueda seguir así los dos próximos días, aunque ya no juegue con él», bromeaba.
– Los que no estaban para bromas hoy eran precisamente los gallitos del torneo. La niebla con la que amaneció Abu Dhabi pareció posarse después sobre todos ellos. Todos han sufrido, aunque no han podido acabar su vuelta y tendrán margen de maniobra mañana para rehacerse y acercarse a Sullivan. McIlroy (-5) marchaba uno más en el día y sin ningún birdie en trece hoyos, mientras que Spieth (-3) también estaba +1 y Stenson (-7) más tres. La tarde siempre es más complicada en Abu Dhabi, pero hoy los grandes favoritos se han nublado. La excepción ha sido Rickie Fowler (-5), que se ha reenganchado al vagón de cabeza con un parcial de tres menos en trece hoyos.
– Mención especial para DeChambeau. El amateur norteamericano ha salido con toda la presión del mundo después de su ronda de ayer y ha respondido de maravilla. Ha hecho dos birdies y un bogey en nueve hoyos y se mantiene a un golpe de Sullivan. No obstante, lo que más ha llamado la atención ha sido su tranquilidad para afrontar todo tipo de situaciones, incluso cuando se ha metido en problemas. Su filosofía sigue siendo especial: «he empezado bien, con dos buenos birdies en el 10 y en el 12, pero después no ha salido mi mejor golf, no he pegado buenos hierros y he estado demasiado en el rough. Hay que aprender la lección: la próxima vez coge la calle, es fácil», señaló.
Precisamente, respecto a los posibles nervios, apuntó que «la adrenalina estaba ahí, pero no diría que era ansiedad, ni nervios, ni nada parecido. He hecho un bogey en el hoyo más fácil del campo, pero no me preocupa, ojalá sea el único de mi tarjeta». Desde luego, DeChambeau no se altera con facilidad. En cuanto a cómo lleva eso de tener que jugar nueve hoyos mañana afirmó que «no pasa nada, empiezo por el hoyo 1, así que será como una nueva ronda». No parece que los nervios vayan a ser un problema para él.
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