Al final del año es cuando hay que hacer las cuentas, las de verdad, lo cual no quita para que la media actual de golpes por vuelta de Scott Jamieson (-11), líder del ISPS Handa Championship in Spain tras la segunda jornada, sea para tenerla muy en cuenta: 69,42 golpes por vuelta después de 26 rondas de competición disputadas en la presente temporada. Lo dicho: quedan muchas vueltas y es muy complicado mantenerse en tales guarismos, pero digamos que la mejor media hasta la fecha de este jugador en una temporada normal (obviando la de 2020, con menos torneos y en campos más sencillos por regla general) se iba hasta los 70,85 golpes.
El escocés no da con la tecla para sumar al fin esa segunda victoria en el circuito europeo. Van pasando los años, ya son nueve, y no llega. Pero de momento, en 2022, se está hartando de firmar tarjetas muy bajas. Así, hasta que el triunfo caiga por derribo. Hoy entregaba un 63, y no es el primero de la temporada, además de otro buen puñado de ‘sesenta y medios’ o sesenta y pocos”…
Vaya, que no es nada nuevo este año ver a este jugador ahí arriba a estas alturas de un torneo. Después, eso sí, hace falta un punto más, tal y como él reconoce: “Este año he tenido buenos comienzos, es más fácil jugar mejor en las dos primeras vueltas, se hace más difícil a medida que avanza el torneo, así que espero poder hacer un buen trabajo y seguir jugando este golf”.
Uno de los dos compañeros del escocés en el partido estelar de mañana (saldrán de tres en tres, todos los partidos por el tee del 1) será Adrián Otaegui (-8), que hoy ha firmado una tarjeta de 66, igual que la del jueves. Tampoco es mala media, no señor. El jugador español salía hoy como un tiro, con birdies en los dos primeros hoyos de la vuelta, pero enseguida le caía un doble bogey en el hoyo 5…
Su caddie, el británico Ian ‘Stretch’ More, que lleva junto a Adrián desde el inicio de temporada, debe saber muy bien que al jugador vasco no le gustan los grandes discursos en el campo. Es de hablar muy poco. Lo justo y necesario. Así que después del tropiezo bastó con un simple comentario. Casi una sola palabra: reset. A Otaegui, ya decimos, es mejor no hablarle demasiado, si aspirar a mantenerte en su bolsa mucho tiempo. Al fin y al cabo, probablemente se trata de uno de los jugadores que menos ayuda externa necesitan para mantener bien afilada la buena actitud en el campo. No suele ceder ni un milímetro, vengan bien o mal dadas.
Otaegui ha seguido pegando hoy muy bien los hierros. Y luego, igual que el jueves, remata en los greenes. Lleva ya trece birdies en dos jornadas. Hoy pegaba el golpe del día después de fallar la calle en el hoyo 16, par 5, y dejarse un tercer tiro desde cerca de 170 metros a bandera: a punto estaba de embocar y se dejaba el birdie hecho… Mañana toca partido estelar. Actitud, actitud y actitud.
