No va más. La Final de la Escuela del circuito europeo ha consumido hoy la quinta jornada y ya sólo queda la última ronda para conocer quiénes serán los 25 jugadores y empatados que obtienen los derechos de juego para la temporada 2020. Hay quienes tienen ya muy avanzado el camino, aunque nadie debe despistarse: que le pregunten al sudafricano Louis de Jager, que hoy arrancaba el día a las puertas del top ten, cómodamente instalado por encima del listón del objetivo, y ha perdido casi cuarenta posiciones tras firmar un 76…
Tres españoles pasan el corte y dos en puestos de tarjeta en la Final de la Escuela
Y hay otros que todavía tienen a tiro el objetivo y necesitan una última y efectiva carga en el Lakes course del Lumine Golf Club (Tarragona). Sería este el caso de Pedro Oriol (-8), que con un parcial de ocho menos en las dos últimas vueltas (hoy ha entregado un 68) le ha dado un giro de 180 grados a una precaria situación, primero para pasar ayer el corte y después para arrimarse de verdad a la zona caliente, puesto que se ha colocado a un solo golpe del puesto 25º.
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Vayamos por partes. Lo cierto es que ha sido un martes muy positivo para los tres españoles que quedaban en la lucha tras el corte. Alejandro Cañizares (-14) se ha metido en aquel primer grupo que aquí se citaba, el de aquellos que tienen pie y medio dentro del objetivo, aunque aún no puedan ni deban relajarse. Así es, gracias a una ronda de golf muy sólida, con tres birdies y sin bogeys en la tarjeta. Cañi dispone ahora mismo de un colchón de cinco golpes sobre la línea del objetivo, pero haría bien en marcarse metas más altas. Por ejemplo, la de volver a ganar esta Final, igual que el año pasado. No es imposible, puesto que partirá mañana a cuatro golpes del líder en solitario, el danés Benjamin Poke (-18), y está a sólo dos del segundo clasificado, el finlandés Sami Valimaki (-16).
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Carlos Pigem (-12) también ha hecho los deberes, aunque su margen de maniobra y tranquilidad es algo más corto. El catalán arrancaba con bogey, pero a partir de ese punto mantenía la vuelta y el juego bajo control casi en todo momento, cerrando con un birdie en el 18 (hoy vuelta de 69). Pigem llega al momento cumbre en el puesto 12º, una situación que todos habrían firmado hace cinco días…
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En cuanto a Oriol, lo dicho: el madrileño está yendo de menos a más, que es como se sacan adelante estos maratones de juego y estrés. La vuelta de Oriol ha ido más en modo montaña rusa, hasta el punto que a falta del último tercio marchaba al par en el día, pero con cuatro birdies y cuatro bogeys en la tarjeta. No obstante, finalizaba a lo grande, demostrando una excelente actitud, con tres birdies en ese último tercio y, más en concreto, dos consecutivos para finalizar. Todo un subidón de cara a la gran prueba final de mañana. Ninguno de los tres españoles lo tiene hecho, pero las sensaciones que han transmitido en la antesala de la hora de la verdad han sido muy buenas.
