Diez españoles disputan esta semana el Volvo China Open y probablemente ninguno de ellos acuda a la cita con el objetivo prioritario de conseguir una plaza para el PGA Championship, segundo Grande del año, posibilidad que aún está abierta, pues la conseguirán los tres primeros del Asian Swing del circuito europeo, que precisamente finaliza esta semana en China.
A ver, es que el asunto está muy complicado. Todos ellos, los diez, necesitarían ganar el torneo para darse una opción. Y a partir de esta premisa, unos lo tendrían mejor que otros. Vayamos por partes.
– Iván Cantero, octavo en el ranking del Asian Swing, es el mejor colocado y necesita básicamente que ocurran dos cosas. La primera: ganar el torneo. La segunda: que Kiradeh Aphibarnrat no quede segundo en solitario. No hay que darle más vueltas en este caso.
– Con Alejandro del Rey, decimosexto en dicho ranking, ocurre prácticamente lo mismo, con un matiz: necesita ganar y que Aphibarnrat termine segundo empatado con otros dos jugadores o peor.
– Después están los casos de Adrián Otaegui, Manu Elvira, Adri Arnaus y Ángel Hidalgo. En sus cuentas entran en juego más variantes, pero quedémonos con estas ideas generales: necesitan ganar, por supuesto, y además que Jesper Svensson no se meta arriba (Otaegui, que es el que más ha sumado, necesitaría que el sueco quedara duodécimo o peor; e Hidalgo, que es el que menos ha sumado, necesitaría que acabara fuera del top 40 del torneo); que Aphibarnrat termine en quinta posición o peor; y que Bairstow y Veerman no acaben segundos.
– Por último, estarían los casos de los cuatro españoles que todavía no han sumado nada y que juegan en China: Pablo Larrazábal, Nacho Elvira, Santi Tarrio y Rafa Cabrera Bello. Pues bien… No hay casos. Incluso ganando el torneo no podrían, ya que sumarían 500 puntos, los mismos que tiene ya el tercero en el ranking, Jesper Svensson. Ni siquiera lo superarían si el sueco fallara el corte, pues en caso de empate primaría el jugador con mejor clasificación en la Race to Dubai una vez finalizado el torneo, y ninguno de ellos puede superar a Svensson en este ranking, ni siquiera ganando.
– Eso sí, Pablo Larrazábal podría meterse todavía en el PGA Championship por otra vía: si gana el torneo se metería muy probablemente en el top 100 mundial y recibiría la invitación.