Se afilan los cuchillos en el Hilversumsche Golf Club (Hilversum, Holanda), donde ha finalizado la segunda jornada del KLM Open. Un día algo desapacible, más bien fresco en la temperatura, con lluvias aisladas e intermitentes, ha complicado sensiblemente las cosas a los jugadores respecto al jueves (la media de golpes total del campo ha ascendido más de medio golpe). Así que nadie se ha escapado en la cabeza y tenemos por arriba a 35 jugadores en sólo cinco golpes, o si ustedes los prefieren, 78 jugadores (todos los que han pasado el corte) en ocho golpes…
Así que los vuelcos y las alternativas pueden estar a la orden del día. La Armada, por si acaso, tiene múltiples y variadas opciones. El golf español, de hecho, ha colocado a cinco jugadores entre los 25 primeros, en un margen de no más de cuatro golpes con los líderes, Colsaerts y Kapur (ambos con -8). Cómo nos gustan estos fines de semana…
El turno de tarde, ciertamente delicado por esas condiciones de juego que comentábamos, ha sido muy propicio para los nuestros. Y la cosa tiene su mérito, porque tanto Pablo Larrazábal (-4), como Nacho Garrido (-6), Gonzalo Fernández Castaño (-5) y Alejandro Cañizares (-4), han comenzado el día cuesta arriba.
Garrido, Castaño y Larrazábal tropezaban bien pronto en sus respectivas rondas con un doble bogey cada uno. Los madrileños en los hoyos 1 y 3, respectivamente, y el barcelonés en el hoyo 11, tras comenzar su vuelta por el 9. Y Cañi tardaba en arrancar y también anotaba un bogey en su sexto hoyo.
Pero todos y cada uno de ellos solventaron la papeleta con entereza y solvencia. Así que hay que anotarles un diez en una de las asignaturas más complejas de este deporte, la de la paciencia. Larrazábal terminaba empatando con el campo para mantenerse arriba y con opciones. Y el resto finalizaba incluso ganando la batalla al recorrido. Estos cuatro, junto a Lara (-5) (ver crónica de la mañana), forman un potente quinteto de cara al fin de semana. Quirós (-2) y Cabrera Bello (-1), como ha quedado dicho, tienen margen para venir desde atrás.
Suneson y Pablo Martín (ambos con +1), se han quedado finalmente fuera del corte por un golpe , tal y como se sospechaba esta mañana.
Hay que destacar el recital de Garrido en los últimos siete hoyos de su vuelta, donde ha firmado cinco birdies. Recital de golf en general, y con el putter en particular. Y es que Nacho mantiene las potentes constantes vitales que han caracterizado a su juego durante todo 2009 y 2010… Así que, en cuanto se pone a embocar, sale disparado hacia la zona caliente.
